Córdoba. El gobernador José Manuel de la Sota dejó inaugurado el 135° periodo ordinario de sesiones de la Legislatura provincial. En su discurso, repaso acciones encaradas, promesas cumplidas y un plan de obras a cumplir en el 2013. No hubo críticas al gobierno nacional.
En un discurso en tono conciliador, De la Sota -desde su inicio- dejó claro que no era el ámbito para reclamar o “señalar diferencias con otros gobiernos”.
“Debo decir que los reclamos en defensa del pueblo de Córdoba están donde deben estar. A las diferencias políticas, hay otras tribunas donde discutirlas, yo vengo hoy a cumplir con el mandato de la constitución, vengo a informar sobre la marcha de la administración en el 2013”, destacó De la Sota.
La presentación mostró a un De la Sota ejecutivo, detallando las acciones que se cumplieron y las que se pondrán en marcha, sin lanzar críticas, por el contrario -en tono conciliador- agradeció a intendentes radicales, juecistas e incluso a jefes comunales kirchneristas, la relación institucional que permitió “gobernar en equipo”.
“Manteniendo nuestras visiones distintas, y nuestras pertenencias partidarias, pero gobernando para los cordobeses sin distinciones”, señalo el gobernador.
Promesas “cumplidas” y un “ambicioso” plan de obras
Ante la presencia de legisladores oficialistas y opositores, miembros de otros poderes del Estado y funcionarios provinciales, el mandatario cordobés hizo un repaso de “todas” las promesas de campaña que, según el gobernador: “hemos cumplido”; y que lo llevó a la gobernación por tercera vez.
El Boleto Educativo Gratuito, los programas Primer Paso y Becas Universitarias y Terciarias, medicamentos gratuitos en hospitales públicos, los créditos hipotecarios del Banco de Córdoba, y el programa de Lucha contra la Trata de Personas y la Esclavitud Sexual y el nuevo Fuero Judicial en materia de lucha contra el narcotráfico, fueron las acciones más destacadas por De la Sota, asegurando su continuidad.
Además, el gobernador anunció un plan “ambicioso” de trabajo en materia de infraestructura vial. En concreto, la pavimentación de rutas turísticas; la reconstrucción de tramos de rutas que unen localidades del interior; la finalización de los dos primeros tramos, y la licitación y posterior ejecución de dos tramos más de la Autovía Ruta 36, Río Cuarto-Córdoba, lo que representará el 55 por ciento de la autovía que une las dos capitales de la provincia. A lo que se suma, la terminación del tramo Córdoba – Monte Cristo de la Autovía RN 19.
También habrá obras en la Capital, la construcción del nudo vial El Tropezón; se terminará la pavimentación de la Av. Spilimbergo desde la Circunvalación hasta el Aeropuerto Córdoba; se rediseñará y asfaltará el Camino a San Carlos y el Camino a 60 Cuadras; y se continuará con la obra en la Av. Ricardo Rojas.
Sobre la polémica Tasa Vial instrumentada en su primer año de gobierno, De la Sota advirtió: “es un peaje indirecto que todos pagamos para mantener y reconstruir la red vial de la provincia. Allí donde sus fondos se usen, no podrá haber peajes directos y viceversa, donde hay peajes directos no podrán usarse los fondos de la Tasa Vial. Y como todos la pagamos, debemos mantener y reparar las rutas de todas las regiones provinciales”.
Un párrafo “político”
La única mención que podría interpretarse como mensaje político hacia sectores internos del justicialismo y movimientos “K”, fue cuando De la Sota utilizó su eslogan característico de gobierno: “Nosotros peleamos por Córdoba y no por pelear”.
A renglón seguido, agregó: “No habrá ninguna ambición personal ni ningún interés partidista que sea superior a la defensa de los derechos de Córdoba y los cordobeses”.
Resultó un discurso “ejecutivo y conciliador” por lo que se expresó y sobre todo, por lo que no se apuntó. De la Sota dejó así inaugurado el periodo legislativo que respondió a lo que él mismo precisó: “vengo hoy a cumplir con el mandato de la constitución, vengo a informar sobre la marcha de la administración en el 2013”.
Quedó para “otras tribunas” la discusión con la Nación. Otros ámbitos para el enfrentamiento -por los derechos de Córdoba- que mantiene el gobierno delasotista con el poder K.