Córdoba. El supersecretario de seguridad, Sergio Berni, llegó a la Capital Cordobesa con la finalidad de supervisar el despliegue de 1.200 agentes de las fuerzas federales, en el marco de un operativo preventivo dispuesto entre el gobierno provincial y la administración central. Se mostró junto al ministro de gobierno Walter Saieg y además, se reúne con De la Sota.
De la Sota solicitó anoche al Jefe de Gabinete de la Nación el envío de gendarmes a territorio cordobés. La información que se tenía era que un grupo de policías impulsaban un nuevo autoacuartelamiento y el reclamo de las esposas de uniformados por el cumplimiento de los 13 puntos del acuerdo firmado pos saqueos del 3 y 4 de diciembre.
Ante la consulta periodística, el secretario de Seguridad aseguró que “estamos acá por decisión de la presidenta, porque no vamos a permitir que ninguna fuerza policial extorsione al poder político”.
En ese sentido, agregó: “Las armas que les dio la Constitución son para defender los derechos de los ciudadanos”.
En referencia al avance en la investigación judicial por los saqueos y el acuartelamiento de policías, el funcionario expresó que «estamos apoyando la decisión de la justicia que ha ordenado sanciones y detenciones a quienes actuaron de manera material en los saqueos», asimismo, «esperamos que den también con los autores intelectuales», indicó.
Berni destacó que no habla de toda la policía, porque “por suerte son muchos más los buenos policías con los que tenemos que comprometernos, que los malos policías, corruptos, a quienes no solo tenemos que exonerar sino ponerlos en el banco de la Justicia para que se les de la reprimenda que la Constitución y la ley establecen”.
Por su parte, el ministro Walter Saieg, aseguró que la situación de la policía cordobesa es «absolutamente normal» y que «en ningún momento se paralizó». Pero, explicó que “anoche hubo un minúsculo grupo de policías como queriendo acuartelarse nuevamente”, por ese motivo, De la Sota pidió refuerzos como «medida preventiva».