Nacionales. Durante un acto transmitido por cadena nacional en el que se presentó el plan Recuperar Inclusión, que contempla la construcción de 150 casas para recuperar a personas con adicciones, la presidenta consideró que «el mejor antídoto contra la violencia es lograr que mucha gente se sienta incluida«.
En su discurso, luego de mantener videoconferencias con las provincias de Catamarca y Tucumán, Cristina Fernández de Kirchner destacó que la “inclusión es para todos, no sólo para los pobres, sino también para los científicos, para los comerciantes, para los trabajadores, para que tengan más y mejores empleos, y para los empresarios, a los que protegemos para que se desarrolle la industria nacional, para todos los argentinos”.
“No hay un sólo instrumento ni una sola vía para borrar un problema de tanta complejidad” como la drogadicción, señaló la presidenta al hablar ante la presencia de jóvenes militantes K y de otros signos políticos, desde uno de los balcones internos de la Casa Rosada.
La jefa de Estado defendió las políticas de inclusión que lleva adelante su gobierno. En ese sentido, afirmó que su finalidad es “no dejar a nadie en la periferia” porque “el que se siente en la periferia, que siente que la sociedad le ha soltado la mano, cuando mayor es el grado de exclusión, es mayor la violencia entre los argentinos, y eso es lo que queremos evitar”.
A su vez, la primera mandataria sostuvo que “no hay mejor recetas, mejor antídoto contra la violencia que lograr que mucha gente se sienta incluida”, por esa razón, consideró: “Necesitamos miradas y voces que traigan tranquilidad; no voces que traigan deseos de venganza, deseos de enfrentamiento, deseo de odio, porque eso es malo”.
En otro tramo de su mensaje a los jóvenes presentes, recordó la figura del ex presidente Alfonsín. “Entendamos -recordando al gran demócrata que fue Raúl Alfonsín- que siempre hay que arreglar las cosas por las buenas, nunca por las malas”.
Durante el acto central en la Casa Rosada, se presentó el plan Recuperar Inclusión que contempla la construcción de 150 Casas Educativas Terapéuticas (CETs) y Centros de Prevención Locales de Adicciones (CEPLAs) con una inversión total de $1.993 millones.
Además, se firmaron convenios para que tres universidades nacionales, la de Quilmes, la de Avellaneda y la de San Martín, funden “colegios de excelencia” en sus respectivas jurisdicciones de los niveles del Nacional Buenos Aires o el Carlos Pellegrini, enfatizaron las fuentes oficiales.