Córdoba. De esta manera, se pronunció el mandatario provincial, en el marco de la rehabilitación de un tramo de la ruta N° 3. La obra, que demandó casi $77 millones, recorre más de 25 kilómetros entre las localidades de Bell Ville y las proximidades de Justiniano Posse, en la unión con la ruta provincial N° 6.
“Generalmente las autopistas se hacen a largo plazo para que la paguen varias generaciones, pero Argentina no tiene ningún tipo de financiamiento, y nosotros estamos pagándolas de contado mes a mes”, aseveró De la Sota en lo que significó una crítica a la administración kirchnerista.
En la mañana de este lunes, el gobernador José Manuel De la Sota, inauguró la rehabilitación de la ruta provincial N°3, en el tramo comprendido entre la ciudad de Bell Ville y la intersección con la ruta provincial N°6.
Desde el Ejecutivo cordobés se enfatizó que con la inversión provincial -fondos provenientes de la Tasa Vial- “se logró recuperar el tránsito fluido de este importante corredor del departamento Unión, y reactivar la comunicación de los grandes centros de producción con los corredores nacionales de las rutas N° 9, N° 8 y N° 7”.
“Esta obra se ha hecho para salvar vidas, porque no hay nada más importante que cuidar la vida de la gente. La accidentología vial que hay en Argentina es mucha, y en muchos casos ocurre por rutas en mal estado”, opinó el gobernador, al tiempo que resaltó la importancia de respetar la ley vigente de alcohol cero en las rutas.
De la Sota expresó además que se reforzarán controles del peso de los camiones que transitan por la ruta para evitar que los caminos se destruyan. “La ley tiene que ser pareja para todos. No puede ser que haya transportistas irresponsables que destruyan lo que construimos con tanto esfuerzo. El que viola la ley, que lo pague”, afirmó.
Por su parte, el intendente de Bell Ville, Nelson Ipérico, se mostró agradecido por la obra: “Es un día de fiesta hoy porque hemos dejado la Ruta N° 3 en óptimas condiciones”, así como también destacó la ayuda aportada por la provincia cuando la creciente azotó la localidad y dejó en peligro a la población.
