Córdoba. Cuatro de los siete candidatos a gobernador participaron del debate de propuestas impulsado por las universidades Nacional de Córdoba, Nacional de Villa María y Católica de Córdoba. Las ausencias de los postulantes de UPC, Juntos por Córdoba y Córdoba Podemos, dejó truncó la posibilidad de ofrecer a la ciudadanía un espacio donde todas las fuerzas políticas expusieran su plan de gobierno para Córdoba. Hubo críticas de los candidatos presentes y un fuerte pronunciamiento de las universidades que insistieron en la “mezquindad cívica” de Schiaretti, Aguad y Accastello por no asistir al debate.
En la noche de este domingo, el debate televisado por el multimedio SRT, se llevó a cabo con la presencia de los candidatos Roberto Birri (frente Progresista); Liliana Olivero (FIT); Raúl Gómez (MST – Nueva Izquierda), y Eduardo Mulhall (Nuevo MAS).
Con sus matices, cada uno de ellos cargó contra los ausentes, para después focalizarse en su diagnóstico sobre la realidad de Córdoba y las medidas que piensan adoptar en caso de llegar al gobierno provincial.
Sobre el faltazo de Schiaretti, Aguad y Accastello, Birri consideró que a las “ausencias las terminará calificando la gente” y Mulhall sostuvo que resulta una “actitud antidemocrática” que espera que la población se de cuenta y “le dé la espalda el próximo domingo”
En tanto, Olivero se sumó al repudio expresado por las universidades. Por su parte, Gómez defendió el derecho a debatir políticas ya que “nuestro pueblo lo ha conquistado enfrentando a una dictadura militar”, remarcó y tildó de “agravio” las ausencias.
En el plano de la exposición de ideas por parte de los cuatro candidatos a la gobernación, las distintas posiciones tuvieron un eje en común, un duro cuestionamiento de los opositores hacia la gestión de gobierno de UPC en materia de seguridad y lucha contra el delito, presión impositiva, desempleo y exclusión.
Desde los sectores de izquierda, sumaron críticas por el modelo productivo pensado para las grandes corporaciones y la destrucción del medio ambiente debido a la sojización y el desmonte.
Tras el debate televisado, los postulantes dialogaron con Agenda 4P. Quien encabeza la propuesta del frente Progresista, destacó que “los procesos electorales son debates de ideas, confrontación de propuestas, miradas de proyectos que a veces se asemejan y a veces son distintas. Desde ese punto de vista yo estoy satisfecho por haber podido participar”.
Consultado por su planteo de que es necesario una nueva ley de seguridad y la derogación del Código de Faltas, Birri expresó que “el actual modelo de seguridad de la provincia ha fracasado”.
En ese sentido, detalló: “Ha aumentado el nivel de violencia y los delitos; ha habido abuso policial; la policía fue cooptada por el narcotráfico”. Por lo cual, “sería una torpeza absoluta repetir un esquema y un modelo que ha fracasado. Hay que trabajar en una nueva ley de seguridad bajo los paradigmas de la seguridad democrática”, apuntó.
Señaló además que hace falta “una policía que combata el delito complejo, las grandes bandas criminales, al narcotráfico. Ese tipo de policía necesitamos; para eso hay que hacer una reforma profunda”.
“También proponemos crear una policía municipal que haga políticas de seguridad de proximidad, vecinal, en el barrio. Y hay que ser duro con el delito pero mucho más duro con las causas que le generan como son muchas veces la exclusión, la falta de oportunidades, la falta de educación y trabajo”, indicó.
A su turno, la candidata del Frente de Izquierda, dejó en claro que su propuesta está dirigida al sector de los trabajadores y a las clases populares, “no a los empresarios que queremos afectar fuertemente con la reforma tributaria”.
Olivero rechazó el modelo productivo que tiene Córdoba que “está al servicio de los sojeros y de los grandes empresarios” y cuestionó 32 años de alternancia de radicales y peronistas en el gobierno que “no resuelven los problemas de exclusión”.
“El tema del Paicor es una vergüenza provincial” se quejó la ex legisladora, al mismo tiempo, se mostró a favor de encarar un proceso de “cirugía mayor” que implica “trabajo para los padres y que los chicos y nuestros nietos puedan comer en nuestras casas”, subrayó.
Asimismo, insistió en recordar los beneficios que recibieron las grandes corporaciones a través de perdones impositivos, subsidios y leyes especiales. Por eso, opinó que la presión tributaria debe ser re direccionada hacia los sojeros y empresarios.
“Nosotros creemos que ahora hay que ir fuertemente para afectar esos intereses, no solamente porque es una cuestión de equidad e igualdad, sino fundamental mente porque durante décadas ellos ganaron mucha plata y quienes se empobrecieron fueron los trabajadores y los sectores populares”, cuestionó.
Desde la coalición MST-Nueva Izquierda, el postulante a gobernador, apuntó sus críticas contra los candidatos ausentes que justamente son los que disponen de fondos para campaña marcada por el marketing.
“No se dignan a debatir porque las corporaciones que les pagan las campañas son las mismas para las que después ellos gobiernan y eso es lo lamentable”, reprochó Gómez.
En contraposición al modelo productivo que hoy tiene Córdoba, al cual calificó de ser “extractivista”, acentuó que su fuerza política propone un modelo “no sólo que proteja el medio ambiente sino en armonía con la vida y el desarrollo humano”.
Al respecto, se mostró en contra de seguir con el modelo actual que “está al servicio de producir ganancias para las corporaciones, para la concentración de la riqueza”.
Ante la consulta de Agenda 4P, el candidato del Nuevo MAS, fijó como prioridad de gobierno, tres medidas concretas. Mulhall señaló que lo primero es “aumento del salario de 15 mil pesos, prohibición de suspensiones y despidos, y estatización de toda planta que cierre”.
En segundo lugar, apostó por un proyecto estratégico de obras públicas y de viviendas que permitan un nuevo proyecto de desarrollo económico en la provincia.
“En tercer lugar, estamos planteando el desgravamiento del impuesto al salario y al impuesto al consumo; y no una vergüenza como lo que dice Schiaretti de que va a poner un IVA provincial”, enfatizó.
Para finalizar, también se mostró partidario de gravar “fuertemente” a las grandes fortunas de la soga, empresarios automotrices y de la agroindustria. “De algún lado tiene que salir el dinero para un próximo ciclo industrial que va a permitir generar riqueza y trabajo para el conjunto de los cordobeses”, concluyó.