Para Stiglitz y Bárcena, urgen una acción colectiva global para financiar el desarrollo

stiglitz y barcenaEtiopía. Ministros y altos funcionarios de América Latina y el Caribe, junto al Premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz y la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, Alicia Bárcena, coincidieron este martes, durante un evento celebrado en Addis Abeba, en la necesidad de una acción colectiva global para financiar “un desarrollo sostenible e inclusivo”, en un marco como el de las Naciones Unidas, donde todas las voces sean escuchadas.

El encuentro, dedicado a analizar la movilización doméstica de recursos y la gobernanza financiera internacional desde la perspectiva de países de ingreso medio y pequeños Estados insulares en desarrollo, fue organizado por la CEPAL junto a los Gobiernos de Chile y de Colombia y se celebró en un hotel de la capital etíope, en el marco de la Tercera Conferencia Internacional sobre Financiamiento para el Desarrollo que se desarrolla en esa ciudad del 13 al 16 de julio.

“Necesitamos un acuerdo global discutido en el marco de una institución internacional donde todos pueden ser escuchados, como son las Naciones Unidas”, señaló Joseph Stiglitz, quien valoró el documento de la CEPAL que resume los diez mensajes clave de la consulta regional sobre este tema que se realizó el pasado marzo en Santiago de Chile con la participación de los países de América Latina y el Caribe.

En referencia al financiamiento, el Premio Nobel de Economía, sostuvo que el problema no es la falta de liquidez, sino que ésta no se canaliza hacia la inversión. En ese plano, expresó que los países desarrollados no suelen cumplir con sus compromisos de ayuda oficial al desarrollo (AOD).

stiglitzManifestó además que en ocasiones tratan de evitar que los Estados en desarrollo aprueben regulaciones sobre los mecanismos de tributación de la inversión extranjera directa (IED). “No es tan estable como se cree y está muy concentrada en terminados sectores y países”, advirtió.

Por esa razón, la Secretaria Ejecutiva de la CEPAL, requirió con urgencia “mayor transparencia, reciprocidad y cooperación internacional en los ámbitos fiscales y tributarios”, a efectos de potenciar la movilización doméstica de recursos.

Bárcena remarcó la necesidad de combatir los flujos ilícitos que se generan en la evasión tributaria de empresas transnacionales y nacionales. Según Global Financial Integrity (2014), los flujos ilícitos que salen de América Latina sobrepasan los 150.000 millones de dólares.

Perdón por deuda pública  

En el debate también se analizó la propuesta de la CEPAL, para que las instituciones internacionales acreedoras condonen la deuda pública externa multilateral de los países del Caribe anglófono, contraída en gran parte debido a los desastres naturales que han afectado a la zona en los últimos veinticinco años.

Los recursos que se liberen deben alimentar un fondo de resiliencia que apoye el financiamiento de medidas de mitigación y adaptación del cambio climático.

Peter Phillips, ministro de Hacienda de Jamaica, y Darcy Boyce, ministro de Estado en la Oficina del Primer Ministro de Barbados, subrayaron las limitaciones fiscales a las que hacen frente los países del Caribe anglófono debido a la carga de la deuda externa, al descenso de los ingresos procedentes del turismo y a la caída de la IED.

“Necesitamos un acuerdo internacional. Esperamos que en Addis Abeba podamos dar inicio a un marco general de políticas fiscales”, apuntó Phillips. “Es necesario llevar este debate al seno de las Naciones Unidas”, indicó por su parte Boyce.