País. El presidente Mauricio Macri recibe este domingo, en la residencia de Olivos, a las hijas del fiscal federal Alberto Nisman, quien hace un año apareció muerto en su departamento por causas que aún se investigan.
Nisman estaba a cargo de la investigación por el atentado a la mutual judía AMIA, ocurrido en 1994, y a punto de explicar ante el Congreso los pormenores de una denuncia.
El 18 de enero de 2015, el día anterior a su presentación, el fiscal apareció muerto en su departamento del barrio de Puerto Madero, a raíz de lo cual la Justicia abrió una investigación que aún no determinó si se trató de un asesinato o de un suicidio.
A pocos días de cumplirse un año de la muerte del fiscal, su madre, Sara Garfunkel, rompió el silencio, al asegurar de que se trató de un crimen por la forma en la que apareció el cuerpo de su hijo y el lugar en donde estaba el arma.
«Cómo él apareció, el cuerpo, dónde apareció el arma, cómo hizo si se mató él para que el arma aparezca en ese lugar. Cuando yo abrí la puerta no vi nada, yo lo vi a él. Salgo y llamo a Swiss Medical, viene el médico, asoma la cabeza y dice ‘hay un arma’. Cerró la puerta y se fue. Entonces yo digo ‘yo no vi ningún arma, quiero ver’. Miré de vuelta y se veía el mango del revólver acá (hombro). Entonces yo no entiendo como hizo el arma para aparecer abajo del hombro izquierdo», detalló durante una entrevista con la Agencia Judía de Noticias (AJN).
Garfunkel señaló además que no se modificó nada en el departamento de Nisman antes de que llegue la fiscal Fein en la fatídica noche
«Nadie entró al baño hasta que vino la fiscal. Yo estaba ahí sentada y hasta que no vino la fiscal, yo de ahí no me moví. Después sí me levanté, pero nadie entró y encima habían puesto de Gendarmería a un muchacho, porque el capo de Gendarmería me quería sacar de la pieza y yo no me quería ir, entonces puso a un muchacho en la puerta del baño para que yo no entre. Y yo me quedé ahí sentada», recordó.
En cuanto al avance de la causa, a partir de la decisión del Ejecutivo nacional de relevar del secreto a los agentes y la desclasificación de documentación de inteligencia vinculada a Nisman, Garfunkel se mostró con pocas expectativas. «Si después de un año no hicieron nada, para mí es difícil», manifestó, aunque sin dejar de expresar que «ojalá pase algo».