País. De esta manera se pronunció el diputado nacional del PRO, Pablo Tonelli, quien pronosticó que la fuerza que reporta a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner «quedará como un sector del peronismo«. Por su parte, el dirigente K, Juan Cabandié, reconoció que «es un momento complejo» para el kirchnerismo, pero negó que La Cámpora esté «en crisis».
En este marco, el legislador macrista consideró «natural» la ruptura del bloque del FpV, a partir del desgajamiento de un sector de diputados liderado por el ex titular de la ANSES, Diego Bossio.
«Fue algo natural para reparar las diferencias entre el núcleo kirchnerista, que se oponen a todo y el peronismo», analizó en declaraciones a radio Belgrano, al tiempo que puntualizó que «hay algunos que pertenecían a ese núcleo, que tienen una actitud más razonable y están abiertos al diálogo».
Por otra parte, Tonelli le bajó el pulgar al acampe que la organización Tupac Amaru mudó a Plaza de mayo en reclamo por la liberación de su máxima referente Milagro Sala, quien se encuentra privada de su libertad desde hace más de tres semanas.
«No me gustan los acampes en lugares públicos. Aparte el gobierno no tiene nada que ver con su detención, se debe respetar lo que ordena la justicia», señaló Tonelli, que desestimó la condición de «presa política» que le atribuyen a Sala sectores del kirchnerismo.
Momento complejo
Al mostrarse reflexivo sobre la situación actual de la fuerza que responde a CFK, el diputado nacional Juan Cabandié, reconoció que «es un momento complejo» para el kirchnerismo, pero negó que La Cámpora esté «en crisis» y destacó que la movilización del 24 de marzo permitirá poner a prueba la capacidad convocante de las organizaciones kirchneristas.
«Obviamente es un momento complejo (para el kirchnerismo) a partir del momento en que no hemos ganado las elecciones. La gente nos dijo que no por muy poquito, por dos puntos. En ese caso, nuestra tarea es la de ser oposición», recalcó.
«Si Cristina el 9 de diciembre hubiese salido a la plaza y éramos 10 mil personas, estaríamos en problemas, pero fueron 600 mil», resaltó Cabandié.
«No está en crisis La Cámpora», aseguró, al ser consultado sobre si la agrupación liderada por Máximo Kirchner podrá conservar la gravitación que tuvo cuando el kirchnerismo controlaba los resortes del poder político.
De esta manera, el parlamentario rechazó la versión de que La Cámpora dependía de los recursos estatales, y que ahora que quedó marginado de la representación institucional en el Poder Ejecutivo la influencia de la organización perderá volumen.
«El 24 de marzo se verá cuando todas las organizaciones vayamos a Plaza de Mayo. Ahí van a poder ver la cantidad de militantes que tiene La Cámpora», acentuó. (NA)