A pesar de la indicación médica para descansar tras una arritmia que lo llevó a suspender su actividad oficial, el presidente Mauricio Macri recibió este sábado a dirigentes de Cambiemos en la Quinta de Olivos, donde pasará el fin de semana.
«Desde el lunes puede llevar una vida absolutamente normal. Los médicos le ordenaron que hiciera reposo o vida social tranquila el fin de semana. Hoy había una actividad en San Miguel que fue cancelada. El lunes vuelve a la agenda normal de trabajo», señaló el vocero presidencial, Iván Pavlovsky.
El portavoz declaró a radio Mitre que el jefe de Estado «está bien» y precisó que «a las 11.30» el líder del PRO fue sometido «nuevamente a un chequeo» para corroborar su evolución.
En ese sentido, indicó que se trató de un «estudio domiciliario» realizado en la Residencia Presidencial de Olivos.
Asimismo, Pavlovsky afirmó que el líder del PRO permanecerá el fin de semana en la Quinta de Olivos para llevar adelante el reposo indicado por la Unidad Médica Presidencial a cargo de Simón Salzberg.
Por culpa de «algunos ministros»
«Me preocupó. Después, uno tuvo un poco más de tranquilidad porque no fue un problema muy grave, fue algo que seguramente tienen los hombres que tienen esa presión permanente de tener tantas cosas que resolver. Gracias a Dios está bien y puede seguir trabajando como lo viene haciendo», sostuvo el referente sindical.
El líder camionero apuntó contra algunos funcionarios nacionales y los acusó de hacerle pasar «malasangre» al jefe de Estado.
«La malasangre no se la hacemos hacer nosotros, sino algunos ministros que están alrededor de él que se equivocan en los porcentajes de imponer precio a los servicios públicos y eso es preocupante y perjudicial para muchísima gente», subrayó Moyano. (NA)