Reforma política: Oficialismo mantendría las PASO para sumar mayor consenso

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País (13/8/16). Cambiemos mantendría sin cambios el sistema de Primarias, incluidos en el proyecto de reforma electoral enviado por el Ejecutivo y resistidos por la mayoría de los bloques de la oposición, para buscar un texto consensuado y tener a fin de mes un dictamen conjunto para llevarlo al recinto de la Cámara baja a principios de setiembre.

Si bien estaba previsto que el plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales y Presupuesto, que presiden los diputados del PRO, Pablo Tonelli y Luciano Laspina, se reuniera el martes próximo para retomar el debate sobre la reforma electoral, la presencia ese día del Ministro de Energía, Juan José Aranguren, modificó la agenda y obligó al oficialismo a postergar para el jueves a las 15 esa discusión.

De esta manera, el oficialismo tendrá dos días más para continuar analizando con los asesores de los diferentes bloques las propuestas de las bancadas opositoras para modificar el texto enviado por el gobierno de Macri que establece, entre otras cuestiones, el sistema de boleta única electrónica.

En ese marco, altas fuentes parlamentarias de la conducción de Cambiemos adelantaron que “las PASO no se van a modificar” porque, admitieron, “no hay acuerdo político de los propios partidos” que rechazan el impedimento de votar por diferentes agrupaciones en cada categoría electoral y que constituía el aspecto central de la reforma.

Por eso, en el oficialismo admiten que en el plenario previsto para la próxima semana se seguirá discutiendo y no se podrá avanzar en un texto consensuado, ya que se seguirá trabajando en un borrador que podría tener dictamen de comisiones a fin de mes.

Los fuertes cuestionamientos del arco opositor obligaron al oficialismo a ceder en ese punto para buscar un texto consensuado ya que se necesita –dado que se trata de una ley electoral- 129 votos afirmativos en la Cámara de Diputados y 37 en el Senado.

En principio, la intención de Cambiemos era tener aprobado el proyecto lo antes posible y poder implementarlo en las elecciones de 2017 pero, debido a las diferencias que generó sobre todo respecto a esta modificación de las PASO que trabó la discusión, estiman que se podría dificultar su utilización en los próximos comicios.

FRIGERIO-CON-GOBERNADORES
Es que, luego de su paso por la Cámara de Diputados, el proyecto debe ser aprobado por el Senado, donde será clave la postura que adopten los gobernadores, ya que muchos de ellos fueron electos gracias al corte de boleta como el caso del jujeño Gerardo Morales, que fue como candidato a gobernador en las boletas que encabezaba a la presidencia, Sergio Massa, que ganó en esa provincia, pero también en las que llevó a Mauricio Macri.

La postura de los gobernadores, en tanto, estará atada además a los acuerdos que puedan hacer los mandatarios provinciales con el  Ejecutivo, en el marco del debate del Presupuesto 2017, que debe ingresar a mediados de setiembre próximo a la Cámara de Diputados.

En ese sentido, los consensos para avanzar en la reforma electoral, según admiten los propios oficialistas, “serán cada vez más complicados cuanto más cerca estén las elecciones de 2017 porque los posicionamientos en general y la necesidad de diferenciarse» van a conspirar en la búsqueda de acuerdos sobre los aspectos centrales de la reforma.

Algunos legisladores, incluso, habían puesto en duda que se lograra avanzar este año debido a que también, el proyecto había sido cuestionado por la propia Cámara Nacional Electoral que consideró que la iniciativa impulsada por el Gobierno nacional tiene «deficiencias» y es «insuficiente», a la vez que advirtió que no se especifica el presupuesto con que contará el organismo para auditar los procesos electorales.

En general, la mayoría de los bloques respaldan el reemplazo de las boletas de papel, a la que sólo se oponen kirchnerismo y la izquierda, mientras que los massistas y el bloque Justicialista quiere modificaciones pero respaldan la implementación de la boleta única para impedir el robo de las mismas en los cuartos oscuros, que se sucede en cada elección.

En ese marco, el bloque Justicialista que integra Diego Bossio, planteó como alternativa que la reforma se aplique en forma gradual, al igual que se implementó en Salta, uno de los primeros distritos en incorporar la boleta electrónica, y hacerlo como prueba piloto en algunos distritos y después ir incorporando provincias para no hacerlo en forma plena a nivel nacional.

En el oficialismo, admiten que en la propia ciudad de Buenos Aires, donde se aplicó por primera vez en la última elección, hubo inconvenientes en la implementación de la boleta electrónica y de hecho, el sistema tuvo fallas y recibió varias denuncias de irregularidades, por lo cual no descartan esa posibilidad.

Una vez zanjada la discusión en torno a la modificación de las PASO, el debate pasará ahora por definir cómo se verá reflejada tan amplia oferta electoral en el software de votación, dado que el proyecto no avanza en el diseño de la pantalla y sólo hace referencia en los aspectos generales que debería incluir el sistema para garantizar transparencia. (Télam)