País (9/12/16). Desde la Casa Rosada resaltan los acuerdos que se lograron en el Congreso, donde son minoría, para aprobar gran cantidad de leyes y el «sinceramiento» de muchas áreas, aunque la reactivación económica sigue siendo una cuenta pendiente para el 2017. En cuanto a su imagen, una encuesta reciente da cuenta de un 55 por ciento a favor, pero con marcado descenso a un año del inicio de su gestión.
A un año de su asunción al frente de la Casa Rosada, el presidente Mauricio Macri soportó con altibajos el peso de la «herencia» y logró construir gobernabilidad a través de un diálogo fluido con la oposición, mandatarios provinciales y la CGT, aunque la reactivación económica es su cuenta pendiente de cara al 2017 electoral.
«La cosa se nos anticipaba complicada el 9 de diciembre, pero a partir del 11 nos dimos cuenta de que era bastante peor», señaló un funcionario nacional en diálogo con NA.
Sin embargo, en Balcarce 50 resaltan y valoran que, a pesar de las complicaciones de la situación económica y social, el sistema político «estuvo a la altura de las circunstancias, más allá de algún que otro caso particular».
En ese sentido, en el Gobierno ponen como ejemplo la cantidad de leyes sancionadas gracias al «vínculo correcto» con los bloques opositores y los gobernadores -a pesar de los traspiés con la reforma electoral y la modificación del Impuesto a las Ganancias-, así como también con la CGT y la Justicia.
«Fue un año para sincerar muchas cosas, principalmente el Indec y todo lo que conlleva a la hora de ver los números verdaderos, que sacudieron a mucha gente por lo contundente que fueron», resaltó la fuente macrista, a la vez que reconoció que la «transición fue dura y complicada para mucha gente».
Dólar, tarifas, pobreza, desocupación, empleo estatal, planes sociales, cooperativas y adjudicación de obras son, entre otros puntos, los que pone sobre la mesa el gobierno a la hora de hablar sobre el «sinceramiento de la herencia».
A lo largo del año debut en la gestión nacional, el jefe de Estado y sus ministros apuntaron a tender puentes con la oposición, los gobernadores, la CGT y otros actores como los movimientos sociales para maniobrar una economía que, a pesar de la llegada del tan mentado «segundo semestre», no logró encarar el camino del repunte.
«Recuperamos la cultura del diálogo. Que haya diferencia de posturas e ideas no es sinónimo de enemistad. Tenemos que tirar todos para el mismo lado y eso quedo demostrado», subrayó el funcionario.
Al respecto, otras fuentes consultadas puntualizan los acuerdos y consensos en una gran cantidad de proyectos de ley en un Congreso con minoría; la relación fluida con los gobernadores a través del ministro del Interior, Rogelio Frigerio; así como también el vínculo encauzado con las organizaciones sociales por la jefa de la cartera de Desarrollo Social, Carolina Stanley.
«Así, hablando, debatiendo, con propios y ajenos, se tejió la gobernabilidad», resumió un integrante del Gabinete a un año de la asunción de Macri al frente de la Casa Rosada.
En Córdoba, aparecieron -este viernes- carteles con leyendas críticas hacia el gobierno de Macri en su primer año de gestión.
Imagen positiva, pero con descenso
Se conoció este viernes, una encuesta confeccionada por Opina Argentina para el Diario Popular, en la cual se da cuenta que Mauricio Macri conserva un 55 por ciento de imagen positiva a un año del inicio de su gestión.
Si bien el Presidente conserva guarismos apreciables de imagen positiva, que se combina con un 41 por ciento de apreciaciones negativas, se registra un marcado descenso respecto del comienzo de su gestión.
En aquel momento marcaba un pico de 70 por ciento de valoraciones positivas contra sólo un 27 por ciento de opiniones negativas.
Algunas políticas económicas consideradas «antipáticas», como pudo haber sido la suba de los servicios públicos, sumado al desgaste natural de la gestión, llevaron a que el Jefe de Estado dejara en el camino 15 puntos de imagen positiva en lo que va de su derrotero al frente de la Casa Rosada. (Fuente NA y Redacción).