Córdoba (16/12/16). Con motivo de la denuncia que efectuaron en su oportunidad, por el costo de la construcción ejecutada con fondos de la Lotería de Córdoba, y a raíz de la reciente inauguración en Carlos Paz de un lujoso hotel perteneciente a la Cadena Howard Johnson, el equipo de trabajo del bloque EVC presentó un cuadro comparativo entre ambas edificaciones.
Al renovar la denuncia formulada en conjunto por los legisladores Aurelio García Elorrio (EVC), Liliana Montero (CP) y Juan Pablo Quinteros (FC), por los “abusivos sobreprecios” pagados en la construcción del Hotel Casino Ansenuza, los asesores del parlamentario vecinalista confeccionaron un cuadro comparativo con el hotel recientemente inaugurado en la villa serrana por parte de una cadena hotelera de capitales extranjeros.
El mencionado cuadro de análisis, hizo foco en los valores, metros cubiertos, cantidad de habitaciones, entre otros ítems, de ambos emprendimientos. La conclusión a la que arribó el equipo comandado por el legislador García Elorrio, sostiene el planteo inicial de los tres parlamentarios que reafirmaron “el alevoso, obsceno, descontrolado y descabellado valor que se erogó con motivo de la construcción del Hotel de Miramar”.
En ese sentido, se pronunció el legislador juecista, al resaltar que “la sola vista rápida del gráfico exime de mayores consideraciones” y acentuó: “Verán aquí, con claridad, el monumental robo del que fueron víctimas los cordobeses con el objetivo de ‘desviar’ entre 150 y 200 millones de pesos para la absurda pretensión presidencial del entonces gobernador de la provincia José Manuel De la Sota”.
“Conocemos que el Fiscal que investiga la denuncia efectuada por estos legisladores está a punto de tomar una resolución, y conocemos también, la enorme presión del gobierno de la provincia por ‘cerrar’ la causa y así garantizar la impunidad de este gravísimo hecho”, advirtió Quinteros.
Ante ello, el integrante de la bancada del Frente Cívico, subrayó que “si el Fiscal que investiga los hechos denunciados con lo ya visto y con la voluminosa prueba que fuera aportada por estos legisladores, no encuentra motivos para imputar un hecho delictivo que a todas luces se ve con claridad, no estaremos frente a un situación de negligencia grave, sino lisa y llanamente ante la figura penal de ‘encubrimiento agravado’, cuestión que desde ya se deja planteada para su oportunidad».