País (29/6/17). El presidente sostuvo que es fundamental «combatir las redes de narcotráfico, mafias que hacen dinero a costa del bienestar de los demás y operan con total impunidad». Durante su discurso en Casa Rosada, Macri abordó las cifras de víctimas del uso de sustancias y retomó el debate sobre la litigiosidad laboral que afecta a las Pymes.
“Los argentinos nos merecemos un país donde sólo haya lugar para los que se ganan la vida trabajando. Intermediarios y mafias, afuera”, enfatizó el presidente Mauricio Macri al presentar el primer estudio que se hizo en siete años sobre el consumo de drogas y otras sustancias adictivas en el país.
“Estamos poniendo la verdad por delante y así, con el respeto por el otro, trabajando juntos. Con un Estado transparente vamos a desarmar los caldos de cultivos para esos comportamientos mafiosos y ya estamos viendo los resultados”, remarcó el Jefe de Estado.
Dijo que es fundamental “combatir las redes de narcotráfico, mafias que hacen dinero a costa del bienestar de los demás y operan con total impunidad”.
Macri advirtió que “la mayor mafia es aquella donde el Estado es cómplice”, pero aseguró que con este Gobierno “eso se terminó”.
El Presidente se pronunció esos conceptos al presentar en la Casa Rosada, junto a la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, el Estudio de Consumo de Sustancias Psicoactivas en la población de entre 12 y 65 años, elaborado por la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina (Sedronar).
Subrayó que “nadie puede estar por encima de los valores que el Gobierno defiende: la democracia, la República y el respeto por la ley, que está para proteger sobre todo al que menos tiene”. “La mayor transparencia asusta a algunos”, remarcó.
“A todos les digo: no aflojen. Este cambio, como todo, lo hacemos juntos. Estamos construyendo el país en el que podamos vivir con tranquilidad”, destacó.
Al hacer referencia al informe, Macri puntualizó que “lamentablemente nos confirma que todos estos años ha aumentado, en los jóvenes de 12 a 17 años, el consumo de alcohol, tabaco y también de marihuana y cocaína”.
El Jefe de Estado hizo hincapié en que “hablar con la verdad es comunicar la cifra, aunque incomoden” y apuntó que para afrontar el problema de las adicciones “hay que trabajar juntos organizaciones, referentes, familias y escuelas”.
Felicitó a las fuerzas federales por el esfuerzo puesto en desbaratar las bandas junto a sus pares provinciales porque “realmente están dando una batalla muy importante para nuestro futuro”.
“Esas mafias se creen intocables, crecen frente a la ausencia del Estado y se consolidan cuando se apropian de partes del Estado, pero los argentinos elegimos un cambio y por eso estamos acá”, puntualizó.
Del mismo modo, ratificó su respaldo a los trabajadores frente a las “mafias” que generan juicios laborales, hacen que colapsen los juzgados y obligan a una espera de “tres, cuatro, cinco años para resolver sus demandas”.
“Y también defiendo a esas Pymes que quieren y pueden crecer, y no lo hacen por el miedo a esa maquinaria perversa de juicios sin razón”, resaltó.
Asistieron al acto, el jefe de Gabinete, Marcos Peña; los ministros de Seguridad, Patricia Bullrich; de Desarrollo Social, Carolina Stanley; y de Justicia, Germán Garavano, y el secretario general de la Presidencia, Fernando de Andreis.
También estuvieron el ministro de Seguridad bonaerense, Cristian Ritondo, y el titular de la Sedronar, Roberto Moro.
Informe
El informe precisa que, entre la población de 12 a 17 años, la proporción que quien alguna vez ingirió alcohol aumentó del 21 por ciento en 2010 al 34 por ciento este año.
Puntualiza que alrededor del 48 por ciento de los adolescentes y de los jóvenes lo hizo de forma abusiva en el último mes.
Añade que el consumo de marihuana en la población general subió de 2,3 por ciento al 5,4 por ciento en los últimos 7 años. Este incremento en los adolescentes fue del 1,3 por ciento al 2,7 por ciento.
Los jóvenes de 18 a 24 años son quienes manifiestan mayor propensión a consumir drogas, un 30 por ciento, mientras que el 10 por ciento la probaría si tuviese la oportunidad.
Indica, además, que el 39,6 por ciento de los adolescentes declaró tener dos o más amigos o familiares que se alcoholizaban y el 25,1 por ciento que tiene dos o más amigos que toman drogas.