País (28/8/17). El índice levantó después de 21 meses en baja, aunque solo 4 de cada 10 firmas crecieron, mientras que el 36,8% siguió cayendo. La suba del dólar no fue indiferente en el sector: según los empresarios por ese efecto los costos subieron 9,5% promedio aunque el traslado a precios fue solo 4,2%.
“Como dato alentador, el 61% de las industrias tuvo rentabilidad positiva en el mes”, subrayó Fabián Tarrío, presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
La producción de las Pymes industriales subió 0,6% en julio frente a igual mes del año pasado y en 2017 acumula una baja de 2,2.
Los datos surgen de la Encuesta Mensual Industrial realizada por CAME entre 250 industrias Pymes. El Índice de Producción Industrial Pyme (IPIP) alcanzó un valor de 78,1 puntos en el mes.
La industria Pyme repuntó así después de 21 meses en baja y abre mejores expectativas sobre la posibilidad de finalizar el año en crecimiento.
De todos modos, todavía hay mucha prudencia entre los empresarios. Si bien el 39,2% de las empresas tuvo un progreso anual, un 36,8% continuó cayendo y el 24% se mantuvo sin cambios. Es decir, la reactivación se va extendiendo pero muy lentamente dentro del universo de firmas.
De los 11 sectores, hubo 6 con desarrollo en la comparación anual. Fueron: ‘Material de Transporte’ (4,5%); ‘Alimentos y bebidas’ (1%) y ‘Productos químicos’ (2,2%), “Productos de metal, maquinaria y equipo” (8,4%), “Productos eléctrico-mecánicos e informática (6,9%) y ‘Maderas y Muebles’ (0,5%)
Siguieron en derrumbe fuerte ‘Productos de caucho y plástico” (-8,1%), ‘Minerales no metálicos’ (-7,7%), ‘Productos textiles y prendas de vestir’ (-4,3%), “Papel, cartón, edición e impresión” (-4,3%) y “Calzado y Marroquinería” (-0,8%).
Como dato positivo, el 61% de industrias dijo haber cerrado julio con rentabilidad positiva, la mayor proporción de firmas desde 2012”, remarcó Fabián Tarrío, presidente de la CAME. También descendió a 18% la cantidad de firmas con rentabilidad negativa.
La recuperación de la economía mejoró también el ánimo inversor: la magnitud de compañías que no planea realizar nuevas inversiones este año disminuyó del 61% en junio a 52% en julio. En cambio, el 44% lo está evaluando o ya decidió embarcarse en ellas.
Los movimientos del dólar no pasaron desapercibidos y tras la calma, los industriales ya hicieron números: en promedio los costos subieron 9,5% sólo por ese efecto. Los más afectados fueron ‘Productos químicos’, ‘Productos de caucho y plástico’, ‘Minerales no metálicos’ y ‘Papel, cartón, edición e impresión’.
Hasta fin de año, el 43% de los empresarios cree que la producción de sus firmas crecerá, 24 % cree que se mantendrá, 10% que bajará y otro 14% se mantiene con incertidumbre, mostrando cierta mejora en las expectativas.