País (3/10/17). El ex vicepresidente del kirchnerismo, Amado Boudou, comenzó a ser juzgado por la venta de la ex imprenta Ciccone Calcográfica, y en el inicio de debate su defensa pidió la nulidad por entender que «tiene que contar con la totalidad de los testimonios y las pruebas», en referencia al rol que cumplieron los ex funcionarios de la AFIP, como su titular Ricardo Echegaray- entre otros-, y que aún permanece en el tramo de la instrucción del juez Ariel Lijo.
Ante el pedido de algunas defensas de tener más tiempo para plantear las cuestiones preliminares en el inicio de este juicio, el Tribunal Oral Federal 4 dispuso este martes un cuarto intermedio hasta dentro de siete días en el juicio que se inició contra el exvicepresidente K.
Por lo que el próximo martes 10 se prevé seguir con los planteos y, en caso de dar los tiempos, comenzar con las declaraciones indagatorias de los acusados, quienes podrán o no usar su derecho a hablar ante el Tribunal.
En esta causa se juzga a Boudou así como a su amigo, el empresario José María Nuñez Carmona; el abogado Alejandro Vandenbroele, titular de la empresa The Old Fund; a Rafael Resnnick Brenner, jefe de asesores de la AFIP; Guido Forcieri, exfuncionario del Ministerio de Economía; y Nicolás Ciccone, antiguo dueño de la empresa.
Según la acusación, mientras ocupaba el cargo de ministro de Economía, Boudou -a través de su amigo Carmona y el abogado Vandenbroele como intermediarios- se interesó por la adquisición del 70 por ciento de las acciones de la compañía, encargada de la impresión de papel moneda.
En el caso Ciccone, el ex titular del Senado de la Nación está imputado por negociaciones incompatibles con la función pública, que contempla penas de uno a seis años de prisión, y cohecho (coimas). Télam y NA