País (1/10/17). La asociación que reúne a los profesionales de derecho especializados en trabajo fijó posición al respecto a través de un comunicado en el que se resaltan los puntos más polémicos de la reforma propuesta por el Gobierno macrista.
Tras un repaso de los puntos más polémicos de la reforma que plantea la administración Macri, la asociación que reúne a los letrados especializados en la materia afirmó que se trata de un proyecto que «arrasa con la Ley de Contrato de Trabajo».
El borrador de la reforma integral de la legislación laboral o del trabajo del que habló el Presidente llegó a comienzos de semana a los estudios de la Asociación de Abogados Laboralistas y causó una gran indignación. «Rechazamos de plano sus explícitos objetivos, orientados a arrasar con la Ley de Contrato de Trabajo y las normas protectoras laborales y de la seguridad social», sostuvieron en un comunicado.
En el pronunciamiento público, citaron al propio Presidente de la AAL, Matías Cremonte, quien consideró que el proyecto termina siendo lo que muchos sospechaban: una «flexibilización laboral».
«El proyecto es de flexibilización laboral. No se trata, como se anunciaba, de reformas consensuadas sector por sector. Se trata, por el contrario, de una reforma estructural, integral, que ataca los pilares históricos del derecho del trabajo en la Argentina», advirtió Cremonte.
Y pidió a los trabajadores que luchen para impedir el avance de dicha ley: «Resistir esta reforma no puede depender sólo de las representaciones parlamentarias. Los propios trabajadores y sus organizaciones deben dar batalla a esta reforma regresiva; todos los actores del mundo del trabajo deben hacerlo. No existe ningún ejemplo en el mundo que muestre que haber renunciado a derechos haya creado más trabajo».
Más adelante, en el comunicado la asociación cita una frase que curiosamente fue utilizada también por el ministro de Economía de la dictadura de 1976, José Martínez de Hoz: «Proponen la ‘liberación de las fuerza de la producción’ invocando una célebre y lamentable frase de Martínez de Hoz».
Por otro lado, los abogados laboralistas repasaron todos los puntos más críticos de la reforma: «La iniciativa oficial extiende de modo exponencial la tercerización laboral, desnaturaliza las multas por el empleo no registrado, crea la fraudulenta figura del ‘trabajador autónomo económicamente dependiente’ y reduce la indemnización por despido».
«Por otra parte, habilita a los sindicatos a negociar, a la baja, la ampliación de la jornada de trabajo, eliminando el pago de horas extras; como asimismo, la sustitución del pago de la indemnización por despido que le corresponde al empleador por un ‘fondo de cese de empleo'», se señala.
Además, se observa «la modificación del plazo de prescripción, en forma discriminatoria para las persona que trabajan, pasando de dos a un año, además de conceder disminuciones en las contribuciones patronales y suprimir las sanciones a los empleadores por la violación de las leyes que obligan a registrar la relación laboral».
Tras estas objeciones, la Asociación de Abogados Laboralistas, en conjunto con otras organizaciones de derechos humanos y sindicatos, recordaron que se denunció en el plano internacional, en una audiencia pública ante la CIDH, «las violaciones a los derechos laborales ocurridas durante el gobierno de Macri».
«La CIDH expresó allí que no debía violentarse el principio de no regresividad en materia de derechos sociales. El gobierno ha dado ahora un salto más, desoyendo esas recomendaciones y el movimiento obrero, tanto como las organizaciones académicas y profesionales del mundo del trabajo, deben dar una respuesta», concluyó la entidad que nuclea a los letrados especializados en lo laboral. (ARGNoticias, Perfil y Redacción)
