Córdoba (8/6/18). De esta manera se expresó el legislador del Frente de Izquierda, Eduardo Salas, acerca de lo acordado por el Gobierno de Macri con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Resaltó que más que un “ajuste”, la administración central toma una serie de medidas que constituyen “un plan de guerra” contra la población.
El ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, anunció en la noche de este jueves, que la Argentina recibirá un crédito de 50.000 millones de dólares del FMI. Según el coordinador del equipo económico la primera entrega, por 15.000 millones de dólares, se desembolsará de manera inmediata.
Paralelamente, el Gobierno obtuvo financiamiento de otros organismos multilaterales por 5.650 millones de dólares. Estos recursos se suman a lo acordado con el FMI, lo que totaliza un monto de más de 55 mil millones de dólares.
“El acuerdo lo único que hace es dar hasta el último dólar para garantizar el pago de la deuda usuraria que son 18 mil millones de dólares; el pago de Letes que son 18 mil millones de dólares y para el pago de los intereses por las Letes que son 19 mil millones de dólares”, detalló Salas, advirtiendo que esto representa “exactamente los 55 mil millones” de financiamiento otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI); el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Mundial (BM) y el CAF-Banco de Desarrollo de América Latina.
El dirigente del Partido Obrero (PO) rechazó de plano el acuerdo. Remarcó que “no soluciona otros problemas” del país y sólo sirve para cubrir “a los usureros acreedores de la Argentina, a los que especularon”.
Al tiempo que denunció que las medidas que anticipo el Gobierno que se adoptarán de acuerdo a los compromisos asumidos con el FMI, constituyen “un plan de guerra”. En ese sentido, afirmó que “ya casi la palabra ajuste es un eufemismo”, porque “no hay techo para la inflación; segundo, no hay techo para el dólar”.
Tras la reacción del mercado en la jornada posterior al anuncio del Ejecutivo nacional, Salas advirtió que “este acuerdo debutó con una nueva devaluación, lo cual esto implica inmediatamente un aumento de tarifas”.
También se refirió a la pérdida del poder adquisitivo. El parlamentario de la Izquierda manifestó que “el salario si llega a haber un aumento del 20 por ciento, con este cinco por ciento miserable, (no se hará frente) al 30 por ciento de la inflación”.
“Lo de los jubilados es peor, porque lo acomodan con la inflación del año pasado, es decir estamos frente a un verdadero plan de guerra que creo que no puede pasar con las actuales condiciones del Gobierno, por eso dice que el FMI le deja usar plata para gastos sociales”, puntualizó.
Salas hizo hincapié en las consecuencias de la caída del salario. Esto trae aparejado “una caída del consumo, cosa que ya se está reflejando, sobre todo en los alimentos. Y va haber una caída de la actividad económica”.
Por lo que concluyó: el acuerdo es “inflacionario; representa aumento de tarifas y ataque al salario; es recesivo; todo para blindar a los usureros”.
Ante este panorama, el legislador del PO en el Frente de Izquierda, se pronunció a favor de un plan de lucha para enfrentar lo que viene. Al criticar el accionar de la CGT, Salas aseguró que desde el sindicalismo combativo impulsarán la necesidad de lucha a partir de la convocatoria al paro y las medidas que sean necesarias.
“Nosotros estamos dando otros pasos, el 23 de junio va a haber un encuentro nacional de organizaciones obreras que están en contra de la burocracia. Vamos a establecer desde el sindicalismo combativo un planteo para preparar la huelga, el paro, la necesidad de lucha que la burocracia no quiere hacer”, resaltó.