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Aguad habló de «sacrificios dolorosos y graves», ante los despidos en Fabricaciones Militares

Foto. Gentileza El Diario del Centro del País.

País/Córdoba (17/8/18). Argumentó que la decisión de no revar contratos tiene que ver con el déficit de fabricaciones militares que son 1.600 millones de pesos por año. Entre las dos plantas en Córdoba, suman más de 100 los cesanteados. 

Desde Jujuy, el ministro de Defensa de la Nación, Oscar Aguad, se refirió a los ajustes en las fábricas militares. Afgirmó que “nadie puede pensar que el país, después de 70 años de dilapidar recursos y corrupción sistemática, puede salir de la crisis sin sacrificios”.

“En el caso de Fabricaciones Militares el déficit es de 1.600 millones de pesos por año y eso lo enfrentan todos los argentinos y las empresas”, expresó el funcionario en declaraciones a Cadena 3.

Aguad sostuvo que “los altos impuestos que se pagan en Argentina tienen que ver con los déficit del Estado que pagamos todos”.

En este marco, el titular de la cartera de Defensa destacó que se busca “achicar las estructuras y mejorar la competitividad, porque la decisión es mantener las empresas que son producción para la defensa”.

“Esto significa hacer sacrificios dolorosos y graves, pero si no lo hacemos el resto del país va a pagar por un despropósito”, remarcó en diálogo con la emisora cordobesa de alcance nacional.  

Durante la tarde de este viernes se confirmaron las listas de cesanteados en las plantas de Villa María y Río Tercero en el marco de la reducción de personal. En las ingresos de las mismas se vivieron momentos de angustia entre los trabajadores y sus familias. 

En Villa María son 42 los empleados que se quedan sin su fuente laboral y en Río Tercero suman 59.  En la antesala de un fin de semana largo, en los ingresos a las plantas de las Fábricas Militares de ambas localidades se expusieron las listas de cesanteados.

 

Con un video que comenzó a circular en las redes sociales, el gremio ATE  cuestionó duramente la política comercial de Fabricaciones Militares de la planta de Río Tercero.

Tras la confirmación de despidos en las plantas de Río Tercero y Villa María, se denunció un «boicot», al tiempo que se afirmó que la Fábrica Militar «pierde más de 300 millones de pesos al año por no actualizar precios de sus productos», según consignó Diario Tribuna de Río Tercero. 

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