Córdoba (21/9/19). Cuatro femicidios fueron cometidos por efectivos de la fuerza policial en lo que va del año. Desde la cúpula policial se anunció este viernes la creación del Departamento de Auditoría de Salud Mental. Legisladora opositora criticó duramente la medida.
El último caso se conoció el domingo protagonizado por el policía Carlos Monje, de 35 años, quien asesinó a su pareja Magalí Pérez, de 20 años, y a su madre, Nancy Pérez, de 54 años. Luego, el uniformado se pegó un tiro con la misma arma. Esto ocurrió en la localidad de El Diquecito.
Este doble crimen, seguido de la muerte del autor del hecho, un cabo de la Policía, quien durante 8 años estuvo con carpeta psiquiátrica, la fuerza policial anunció formalmente la conformación de una división específica para el control de los agentes que por su función portan armas.
La Jefatura de Policía de Córdoba informó que en el ámbito de la Dirección General de Control de Conducta Policial, se dispuso la creación del Departamento de Auditoría General de Salud Mental (DASM).
Según se detalló de manera oficial, la mencionada división tendrá la finalidad de coordinar, sistematizar, auditar y delinear acciones que propendan a un control más eficaz de las áreas que intervienen en la prevención de patologías psicológicas, psiquiátricas y de Violencia Familiar.
«El Departamento de Auditoría General de Salud Mental tendrá la competencia exclusiva como instancia superior y definitiva de resolver la situación del personal que reviste en Tareas No Operativas (TNO) vinculados con casos de licencias psiquiátricas o relativas de Violencia Familiar», puntualizó la cúpula policial en un comunicado.
Se conoció que la comisaria inspectora Marcela Santucho, una psicóloga de la fuerza, estará a cargo de este nuevo Departamento que se creó a partir del caso Monje, pese a que desde la institución policial se niege que el DASM sea consecuencia de este trágico hecho, en el cual intervino un uniformado.
Vos opositora
Tras conocerse la noticia de la medida dispuesta por la cúpula policial de crear esta área de Salud Mental para los policías, la legisladora Liliana Montero se pronunció con duras críticas.
La parlamentaria se expresó por las redes sociales, afirmando que es «realmente una burla». También destacó: «Todo marketing y titulares!». Luego de expresar su hartazgo por ya suman cuatro casos en lo que va del año, Montero opinó que «si en verdad hubiesen querido hacer algo serio no sería un departamento dentro de la dirección de control policial».
«Es un problema de falta de programa integral de salud mental, no es ni un problema de control, ni de conducta policial, ni es interno. Es la salud, idiotas!», resaltó la integrante del arco opositor en la Unicameral, quien a su vez es psicóloga de profesión.