CABA (26/10/18). La Legislatura porteña sancionó este jueves su propio Código Electoral que organizará el proceso de las elecciones de jefe de Gobierno, diputados y comuneros en la Ciudad y que plantea la posibilidad de unificar los comicios con la Nación, la paridad de género en las listas y el debate obligatorio de candidatos.
La ley en general fue aprobada durante la sesión de ayer por 49 votos positivos de los bloques Vamos Juntos, Unidad Ciudadana, Socialismo y Peronista; y nueve negativos de los bloques Evolución (que responde a Martín Lousteau), el Partido Obrero, el de los Trabajadores Socialistas y Autodeterminación y Libertad.
Con una implementación gradual desde 2019, el nuevo Código regulará el proceso electoral. En el texto aprobado establece un esquema de autoridades electorales en el que se distinguen con claridad las funciones administrativas de las jurisdiccionales.
Las primeras estarán a cargo de un Instituto de Gestión Electoral con claro perfil independiente y con instancias de participación y control de los partidos políticos y de las organizaciones de la sociedad civil.
Las funciones jurisdiccionales, en tanto, serán llevadas adelante por el Tribunal Electoral establecido en la Constitución de la Ciudad. Este organismo funcionará como control externo y como instancia de resolución de controversias.
El Código también incorpora la paridad y la alternancia como principios y compromete a la autoridad electoral a organizar conjuntamente con partidos, organizaciones no gubernamentales e instituciones académicas un debate de candidatos a Jefe de Gobierno, Legisladores y Comuneros.
Sobre estos puntos, Florencia Zulcovsky, Directora General de Reforma Política y Electoral de la Ciudad, destacó que “esta normativa genera un avance en la representación femenina en las listas de candidatos y promueve un voto informado, fortaleciendo así la democracia y la calidad de sus instituciones”.
Otro punto importante es la incorporación de instancias de control participativo sobre el uso de tecnologías en la elección. Estas garantías institucionalizan los avances ya realizados y los que se realicen en el futuro a través de la participación de los partidos políticos y de la sociedad civil. Este marco de transparencia y control público también se ve reflejado en la incorporación de la observación electoral a la normativa.
Asimismo, este código electoral determina la automatización del empadronamiento para migrantes en la Ciudad. Esto facilitará el ejercicio del derecho de sufragio para quienes han decidido residir en Buenos Aires.
La norma también propone mayor previsibilidad en la definición del calendario electoral, estableciendo las pautas específicas para realizar la convocatoria. Las elecciones se deberán convocar con más de 180 días de anticipación.
“Esto dará al Jefe de Gobierno las mismas facultades que poseen los gobernadores de las provincias en esta temática”, resaltó Bruno Screnci Silva, Ministro de Gobierno de la Ciudad.