Buenos Aires (24/5/19). Y a otros tres efectivos se los imputó por encubrimiento y falsedad ideológica de instrumento público. Así lo dispuso la jueza de Garantía de La Plata Marcela Garmendia.
La justicia penal de La Plata imputó por homicidio doblemente calificado a cuatro de los policías detenidos por la muerte de cuatro jóvenes tras una persecución y choque en la localidad bonaerense de San Miguel de Monte.
Asimismo, se acusó a otros tres efectivos por encubrimiento y falsedad ideológica de instrumento público, según lo resolvió en la tarde de este viernes la jueza de Garantías de La Plata, Marcela Garmendia.
Los investigadores de la muerte de cuatro jóvenes ocurrida el lunes último luego de una persecución policial en la localidad bonaerense de San Miguel del Monte ya establecieron que en el operativo intervinieron siete efectivos que estaban distribuidos en tres patrulleros y que utilizaron dos pistolas reglamentarias de la fuerza.
Aunque aún no lograron establecer cuál fue el motivo que originó la persecución que terminó con los cuatro muertos, consignó Télam.
En ese sentido, la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, aseguró en la mañana de hoy que se están analizando algunos datos que indican que «hay aristas de gravedad» en el caso y que «demuestran que hay algo más complejo» detrás del hecho. (Ver nota: Para Bullrich, «hay otras aristas de gravedad» detrás de lo ocurrido en Monte).
Una fuente judicial explicó a la Agencia Nacional de Noticias que la jueza Garmendia imputó por «homicidio doblemente agravado por abuso de su función como miembro de fuerzas policiales y por el empleo de armas de fuego» al capitán Rubén Alberto García, a los oficiales Leonardo Daniel Ecilape y Manuel Monreal y al subayudante Mariano Ibáñez.
A los cuatro efectivos se les acusó de los homicidios de Camila López (13 años), Danilo Sansone (13), Carlos Aníbal Suárez (22) y Gonzalo Domínguez (14), quienes murieron cuando el Fiat Spazio en el que viajaban chocó contra un acoplado de un camión mientras eran perseguidos y atacados a balazos por la Policía.
Se les imputó además «homicidio doblemente agravado en grado de tentativa» en perjuicio de una adolescente de trece años que también viajaba en el auto y que permanece internada en grave estado en el Hospital de Florencio Varela.
Por este trágico hecho la magistrada de La Plata imputó al oficial subinspector José Alfredo Domínguez y a los oficiales Cristian Righero y Juan Gutiérrez por los delitos de encubrimiento agravado y falsedad ideológica de instrumento público.
Desde el Gobierno de Vidal se tomó la determinación de separar de la fuerza de seguridad a los siete policías detenidos y a otros seis que también cumplía funciones en esa jurisdicción.
El procurador de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, reconoció ayer que «sin los disparos no se hubiera producido el choque».
«No fue solamente un accidente. Hay una relación causal inmediata e ineludible; sin los disparos no se hubiera producido la colisión», afirmó el jefe de los fiscales bonaerenses en declaraciones a la prensa.
Mientras tanto, familiares de las víctimas y organizaciones de izquierda marcharon en la tarde de este viernes desde el Congreso de la Nación a Plaza de Mayo para reclamar justicia.
“Queremos apoyar a las familias de los niños y niñas asesinados por la policía en San Miguel del Monte”, afirmaron en la convocatoria hecha por los familiares de la Marcha Nacional contra el Gatillo Fácil.
Marchamos a Plaza de Mayo para decir #FueMasacre: justicia por pibas y pibas de San Miguel del Monte. #FueLaPolicía #MalditaMinistra #BastaDeRepresión pic.twitter.com/zHHeNSCa61
— Frente de Izquierda (@Fte_Izquierda) 24 de mayo de 2019