País (15/7/19). Esta iniciativa impulsada por el ministerio de Educación de la Nación abrió la posibilidad a más de 143 mil estudiantes de poder continuar sus estudios en otra universidades o realizar movilidades temporales.
A dos años de implementar el Sistema Nacional de Reconocimiento, 60 facultades de Ingeniería adheridas a esta iniciativa, se reunieron para revisar los trayectos académicos que habían reconocido mutuamente en un principio, y adecuarlos de acuerdo a las necesidades que observaron mientras transcurrían las primeras experiencias.
Esta familia de carreras que consta de 25 ramas de ingenierías, fue la primera en firmar los convenios específicos en 2017, iniciativa que abrió la posibilidad a más de 143 mil estudiantes, de poder continuar sus estudios en otra universidades o realizar movilidades temporales.
Este año, los referentes de las universidades adheridas volvieron a realizar reuniones de trabajo regionales y nacionales, culminando la revisión de sus trayectos en un último encuentro que se realizó el 26 de junio en la Universidad Nacional de Córdoba.
La Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) fue partícipe de la prueba piloto de movilidades estudiantiles en 2018 y de la primera convocatoria de 2019, oportunidad en la que enviaron a 9 estudiantes y recibieron a 2.
“Observamos que algunos trayectos formativos estaban sobrecargados de materias, que las asignaturas se dictaban en diferentes cuatrimestres o que eran anuales, lo que impedía, por ejemplo, realizar movilidades estudiantiles semestrales. Esto nos hizo ver la necesidad de rever algunos trayectos, lo que para nosotros significó un verdadero proceso de mejora continua”, expresó Fernanda Guzmán, representante de este sistema en la Facultad de Ciencias Exactas y Tecnología de la UNT.
Marcelo Villar, docente, investigador y referente del sistema en la Universidad Nacional de Sur, explicó que en esta instancia de revisión “se avanzó en dividir ciertos trayectos que en un comienzo estaban conformados por tres o más asignaturas, lo que implicaba que un estudiante tuviera entre un año y un año y medio de cursada”.
“Además, -dijo-, incorporamos nuevos trayectos comunes tanto en la misma carrera como en grupo de carreras afines. Esto permitirá una mayor flexibilidad y más posibilidad de cursar una carrera en diferentes universidades”.
Carolina Chamorro, pro secretaria académica de la Facultad de Ingeniería de la Universidad del Salvador, agregó que “los nuevos consensos permitieron volver a centrarse en el objetivo puntual del sistema, que es justamente romper las barreras que se le presentaban a los estudiantes al momento de realizar cambios de carrera o de instituciones y potenciar la diversidad de oportunidades que brindan en conjunto todas las universidades argentinas”.
Por último, Marcelo De Vincenzi, decano de la Facultad de Tecnología Informática de la Universidad Abierta Interamericana y referente del Consejo Federal de Decanos de Ingeniería, evaluó que “al ser un programa experimental en nuestro país, va cobrando importancia, favoreciendo la movilidad e imponiendo nuevos desafíos a medida que se va implementando”.
Al valorar el hecho de “ser la primera familia de carreras en firmar estos convenios», De Vincenzi manifestó que «sentó precedentes en la elaboración de una metodología de trabajo democrática y colaborativa, en la flexibilización curricular y en la movilidad estudiantil, que pueden ser útiles para las demás familias de carreras que se incorporaron al sistema”.
Desde la cartera educativa se indicó que el próximo paso será la firma de los nuevos convenios de reconocimiento de trayectos formativos, que se realizará el 4 de septiembre en la sede del ministerio.