
País (28/8/19). La Mesa de Conducción de Consenso Federal instó al Gobierno a poner en práctica un programa de Emergencia Alimentaria a raíz de «la grave situación social que atraviesan millones de argentinos en todo el territorio nacional».
El órgano encabezado por el candidato a presidente del espacio, Roberto Lavagna, adelantó que en el transcurso de esta semana propondrá una serie de medidas que conforman un programa alimentario para atender la emergencia nacional.
La Mesa de Conducción se reunió este martes con la participación de Lavagna, el candidato a vicepresidente, Juan Manuel Urtubey; el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz; y el diputado nacional Marco Lavagna.
También formaron parte de la reunión el candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, Eduardo ‘Bali’ Bucca; el candidato a Jefe de Gobierno de la CABA, Matías Tombolini; los candidatos a diputados nacionales Alejandro ‘Topo’ Rodríguez y Carlos Hourbeigt y el jefe de Campaña, Armando Torres.
Desde Consenso Federal se advirtió que Lavagna ya pidió la emergencia alimentaria en un discurso público en el que llamó a los otros candidatos presidenciales a poner un paréntesis por varias semanas a las actividades electoralistas, «pero la respuesta, en cambio, fue acentuar las prácticas proselitistas hasta el extremo de utilizar la Casa de Gobierno como escenario de ampulosos gestos de campaña».
Acerca del acuerdo rubricado con el Fondo Monetario Internacional, en la Mesa Política del espacio referenciado en Lavagna y Urtubey se recordó que en las reuniones que tuvo el binomio presidencial con funcionarios del organismo hace más de dos meses, se les manifestó la necesidad de que sean alargados los plazos de los vencimientos del programa vigente.
En ese sentido, Lavagna le advirtió -ya entonces- al FMI que su programa venía financiando la fuga de capitales especulativos, profundizando el cuadro recesivo con alto costo social y con altísimas tasas de interés incompatibles con el despegue productivo.
Asimismo, el economista y postulante a la Casa Rosada le había manifestado la conveniencia de que se gestionara una asistencia del Tesoro de los Estados Unidos para la recompra bonos con vencimiento hasta el 2024.