
Córdoba (7/10/19). Desde la izquierda se afirmó que para terminar con el hambre y la pobreza hay que dejar de pagar la deuda externa y romper con el FMI.
La primera candidata a diputada nacional por Córdoba del Frente de Izquierda Unidad, Liliana Olivero, salió al cruce del plan «Argentina sin hambre» presentado hoy por el postulante opositor a la Presidencia del Frente de Todos.
“El Plan de (Alberto) Fernández es como la Ley de Emergencia alimentaria que aprobó el Congreso de la Nación y que nada resolverá», aseveró la referente de Izquierda Socialista en el FIT Unidad.
En base a la propuesta de la Izquierda, Olivero señaló que «para garantizar el acceso a la canasta familiar hay que otorgar un aumento salarial igual a ese monto para los trabajadores y terminar con la desocupación».
Sostuvo además que «es una locura que Fernández proponga ferias populares para la comercialización de alimentos mientras fomenta que las grandes multinacionales agro exportadoras saquen nuestros recursos y hagan ganancias con la comida que le sacan de la mesa a la familia trabajadora”.
Al redoblar su crítica contra propuesta del presidenciable del Frente de Todos, la cabeza de lista de candidatos a diputados del FIT Unidad de Córdoba aseguró que “el plan ‘Argentina sin hambre’ es una promesa de campaña que va al fracaso porque no ataca los problemas estructurales de la crisis económica que provoca la pobreza en nuestro país».
En este plano, Olivero enfatizó que «para parar el hambre hay que romper con el FMI y dejar de pagar la deuda externa». Al respecto, detalló la propuesta de la coalición de izquierda.
«Hay que destinar los $70.000 millones que se lleva el FMI por mes en conceptos de intereses de deuda para multiplicar y aumentar los planes sociales», subrayó la dirigente de IS, quien añadió: «Con los $60.000 millones mensuales que se llevan los grandes bancos por intereses de los bonos otorgar un aumento del 100% a 5 millones y medio de jubilados que viven con la mínima».
A su vez, la postulante a la Cámara baja del Congreso dijo que «con los 30.000 millones de dólares anuales que se fugan del país construir 600.000 viviendas populares para generar trabajo genuino».
Por último, Olivero reafirmó: «Plata hay. Para terminar con el hambre y la pobreza hay que dejar de pagar la deuda externa y romper con el FMI para invertir las prioridades”.