País (1/5/20). “La respuesta del presidente Alberto Fernández y de la ministra de Justicia (Marcela) Losardo fueron muy acertadas, explicando cual era la postura del Gobierno frente a esta situación”, consideró el senador nacional del Frente de Todos.
El senador nacional Oscar Parrilli (Frente de Todos-Neuquén) rechazó hoy el otorgamiento de la prisión domiciliaria a detenidos por delitos graves en el marco de la pandemia por COVID-19, y vinculó el cacerolazo realizado anoche a “una campaña mediática y política” en la que “hubo interés en tergiversar y mentirle a la sociedad, para poner al Gobierno de un lado que es rechazado por la gente”.
“A nadie le gusta la impunidad y la injusticia, y por eso nosotros siempre rechazamos la manipulación del Poder Judicial. Todos rechazamos la impunidad o el hecho de liberar a presos con delitos graves”, remarcó Parrilli, ante el debate generado por la prisión domiciliaria a determinados detenidos con el argumento de la pandemia.
“La respuesta del presidente Alberto Fernández y de la ministra de Justicia (Marcela) Losardo fueron muy acertadas, explicando cual era la postura del Gobierno frente a esta situación”, consideró el integrante de la bancada oficialista en el Senado en declaraciones a radio Con Vos.
Sobre el cacerolazo que se registró anoche, el ex titular de la AFI dijo que “todos tenemos derechos a expresarnos, a manifestar y a protestar”, pero en este caso “se generó una situación que no es real” porque “hubo intereses políticos y mediáticos tendientes a tergiversar una realidad, mentirle a la sociedad, para poner al Gobierno de un lado que es rechazado por la gente y que, en realidad, todos rechazamos”.
“Si bien es cierto que es un tema que a todos nos pone mal como es la impunidad, creo que hay una campaña mediática y política en gran parte de esto”, sentenció respecto al rol de los medios y parte de la oposición respecto a las prisiones domiciliarias a detenidos en el marco de la pandemia.
En ese marco, Parrilli fustigó: “Se me cae la cara de vergüenza cuando escucho a referentes opositores como (la presidenta del PRO) Patricia Bullrich y (el jefe de Gobierno porteño) Horacio Rodríguez Larreta condenando la liberación de presos y diciendo que el Gobierno manipula al Poder Judicial, siendo que ellos fueron los que manipularon a la justicia durante cuatro años de una forma inédita en la historia de la democracia argentina”.