País (5/8/20). Fiel a su estilo, la líder de la CC-ARI acusó al presidente y la vice poner a merced de su gobierno la vida y la intimidad de las personas. Afirmó que la medida del Gobierno del Frente de Todos implica «un abuso de poder inadmisible que viola derechos y libertades individuales».
El bloque de diputados nacionales, la Junta Ejecutiva Nacional de la Coalición Cívica y Elisa Carrió rechazaron el DNU 641/20 del Ejecutivo nacional que prohibe las reuniones familiares en el marco de la pandemia de coronavirus.
La dirigencia de la CC-ARI y su máxima referente política afirmaron que el gobierno de Cristina y Alberto Fernández, «con el dictado del DNU N 641/20 estarían incurriendo en el delito de infames traidores a la patria, previsto en el Artículo 29° de la Constitución Argentina».
En un pronunciamiento dado a conocer esta tarde, la fuerza opositora remarca que «el gobierno de Cristina y Alberto Fernández intenta poner a merced de su gobierno la vida y la intimidad de las personas».
«La prohibición de las reuniones familiares en todo el territorio argentino, sin distinción alguna entre provincias, el AMBA u otras localidades, implica un abuso de poder inadmisible que viola derechos y libertades individuales previstos en los Artículos 18° (inviolabilidad del domicilio) y 19° (libertad individual y acciones privadas) de la Constitución. Es una medida que excede el límite de lo razonable, y es contraria al estado de derecho y a la búsqueda de un orden social justo», se advierte en el texto.
A su vez, se sostiene que «se trata de un acto perverso que esconde una finalidad: que no haya expresiones y/o manifestaciones públicas ciudadanas ante el avasallamiento de la Justicia, la búsqueda de impunidad, el cierre de comercios y PYMES, el aumento de la pobreza y el incremento de la inseguridad, principalmente en la Provincia de Buenos Aires».
En el documento también se destaca que «el DNU es inconstitucional y de nulidad absoluta ya que abarca materia penal, expresamente prohibida por nuestra Constitución». Y manifesta que «con este decreto están instalando un estado de sitio de hecho«.
«El Gobierno pretende plantearnos una falsa dicotomía entre vida y muerte, salud y economía, e infundir miedo y angustia en la población. Estamos convencidos que esa no es la salida«, aseguraron los dirigentes de la CC-ARI.
Al enfatizar que «la actual situación nos obliga a entender que debemos ir aprendiendo a convivir con el virus, como están haciendo otros países y ciudades del mundo», la fuerza política opositora demanda «poner en marcha un plan serio y consistente de salida gradual que cuide la salud, nuestra economía y derechos y libertades».
«La salida de la pandemia es con responsabilidad colectiva e individual, no con un estado autoritario y policíaco«, acentuaron las autoridades partidarias, los diputados nacionales y Carrió.