
País (17/8/20). El Jefe de Estado encabezó hoy la ceremonia por el 170 aniversario de la muerte del General San Martín, en el Regimiento de Granaderos a Caballo, en el barrio porteño de Palermo.
En su discurso, en el marco de la conmemoración por el 170 aniversario del paso a la inmortalidad del General José de San Martín, el Presidente Alberto Fernández, destacó que su orgullo nacional fue “plantarse frente a los acreedores”, “construir una vacuna para eliminar el coronavirus” y reconstruir “un país que han dejado aniquilado económicamente”.
Fernández aseguró que «hoy el orgullo nacional se gana plantándose frente a los acreedores y exigiéndoles» que no le hagan pagar a la Argentina «una deuda a costa del pueblo» y también en lograr producir una vacuna «que termine con la pandemia».
«El orgullo nacional nos lleva a plantarnos frente al mundo y decirles que queremos ser parte de la construcción de una vacuna que termine con la pandemia y que nadie lucre con eso y lo hemos logrado», resaltó.
Fernández afirmó hoy que el general José de San Martín fue un hombre “inigualable” e “inmenso” y su “figura debería ser un modelo de conducta a seguir”.
Las expresiones las tuvo al encabezar este mediodía, en el Regimiento de Granaderos a Caballo General San Martín, la ceremonia por la conmemoración del 170 aniversario de su muerte.
“Del mismo modo que hizo San Martín en Cuyo, donde unió a toda la sociedad para poder construir un ejército, hoy nuestras Fuerzas Armadas se unen al resto de los argentinos para enfrentar los problemas del presente. Hoy tenemos que cruzar montañas infinitas que se llaman pandemia ayudando allí donde los argentinos nos necesitan”, acentuó.
El Presidente señaló que el Libertador “dio su vida para que América Latina sea un continente integrado e independiente” y en ese sentido celebró que la Argentina pueda ser parte de la “construcción de una vacuna para terminar con la pandemia” de coronavirus.
Sobre este punto, el mandatario enfatizó: “Vamos a poder abrazar a todo el continente para que termine con la pandemia, para que ya no haya pueblos latinoamericanos que sufran para poder acceder a su remedio”.
En su crítica a la gestión anterior, Fernández aseveró que «tenemos que reconstruir un país que han dejado aniquilado económicamente, que han dejado endeudado de un modo impresionante, que han condicionado el futuro de muchas generaciones, que han sumido en la pobreza a más del 40% de los argentinos».
Así se pronunció el Presidente casi al final de su discurso en uan clara referencia al Gobierno de la coalición de Juntos por el Cambio.
Intolerancia e incomprensión

Cabo Primero Brenda Laureano; Granaderas Gabriela Galeano y Felicitas Reyes.
Durante su exposición, Fernández indicó que “es un día especial porque hoy nuestras granaderas visten el uniforme de nuestros granaderos, y esto no pasaba”.
“El vestir del mismo modo supone integrarlas con los mismos derechos y obligaciones; y como sociedad estamos siendo mejores cada vez que integramos y le damos a la mujer el lugar que le corresponde”, subrayó.
“Es incomprensible, visto a la distancia, que San Martín alguna vez haya visto mellada su conducta por las críticas de aquel tiempo”, dijo el mandatario en otra parte de su discurso y señaló “cómo ha permanecido constante ese modo de proceder de la sociedad de descalificar a hombres de su talla”.
“San Martín fue víctima de la intolerancia y de la descalificación, y en ese espejo de incomprensión y de pequeñeces debemos mirarnos para no ser iguales”, concluyó.
El Jefe de Estado fue recibido al llegar por el jefe del Regimiento de Granaderos a Caballo, Gonzalo Rodríguez Espada. Luego saludó al cuerpo de Granaderos y colocó una ofrenda floral al pie del busto del libertador. Al término del acto realizó una recorrida por el Museo Histórico acompañado por su directora, Carol Edith Vitagliano.
Protagonista de la gesta libertaria, el Regimiento de Granaderos a Caballo fue constituido por San Martín el 16 de marzo de 1812 y desde hace 113 años cumple la función de escolta presidencial.
Estuvieron junto al mandatario en el histórico cuartel, ubicado en el barrio porteño de Palermo, el jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; ministros y ministras y secretarios del Poder Ejecutivo.
También participaron los embajadores de la República de Chile, Nicolás Monckeberg Díaz; y del Perú, John Peter Camino Cannock; los jefes del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, Juan Martín Paleo; de la Fuerza Aérea, Xavier Julián Isaac; del Ejército, Agustín Humberto Cejas; y de la Armada, Julio Horacio Guardia; y el Presidente del Instituto Nacional Sanmartiniano, Eduardo García Caffi, además de otros jefes militares.