
CABA. La administración porteña tomará medidas de restricción si el «amesetamiento» en la curva de casos de coronavirus no se traduce en una baja en la ocupación de camas de terapia intensiva.
La Ciudad de Buenos Aires tomará nuevas medidas de restricción si el «amesetamiento» en la curva de casos de coronavirus no se traduce en una baja en la ocupación de camas de terapia intensiva, según aseguró este martes el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós.
«En la medida que los datos indiquen que tenemos que aumentar las medidas lo vamos a hacer», dijo Quirós y aclaró que «todavía no se ve con claridad» que, lo que denominó como un «amesetamiento» en la curva de contagios, este también influyendo en una baja en la ocupación de camas de terapia intensiva que este martes volvió a quebrar su pico y llegó al 84% en los hospitales públicos porteños.
«Necesitamos que los casos empiecen a bajar. Ya hay algunas sospechas, algunos datos preliminares que lo muestran, luego tenemos que ver que las camas de terapia intensiva no solo se estabilicen sino que empiecen a bajar. Cuando esos dos fenómenos estén a la vista podremos decir que entonces la situación está suficientemente transitada para no agregarle a la sociedad más problemas», aseguró el funcionario porteño sobre la posibilidad de que la Ciudad adopte nuevas medidas de restricción.
Durante la habitual conferencia de prensa en la que Salud brinda informes sobre la situación de la pandemia en el distrito, Quirós explicó «se puede ver con toda claridad que llevamos más de 14 días con la curva que ha dejado de crecer, se ha estabilizado e incluso estos días tiene un leve descenso».
Sin embargo, aclaró que la pandemia «se comporta como tres curvas sucesivas»: la de los casos, la de la ocupación de las camas de terapia intensiva y la de las los fallecidos. Y explicó que es la curva de los casos la que «determina y dispara las otras dos» y que lo que ocurre en una repercute en la siguiente dentro de los próximos «siete a diez días».
Sobre lo que pueda ocurrir en los próximos meses, cuando comience el invierno y la pandemia pueda recrudecer, Quirós señaló que «va a depender críticamente de como avancemos con la vacunación; imposible anticiparnos como va a ser el futuro si no tenemos claridad en como van a llegar las vacunas».
El titular de la cartera sanitaria local también se refirió a la situación en los sanatorios privados de la Ciudad y aclaró que el Gobierno porteño ya entregó unos 100 respiradores del sector. «Vamos a acompañar a cada uno para que puedan atender a la gente como corresponde», dijo.
Quirós, junto al subsecretario de Atención Primaria, Gabriel Battistella, y la directora general de Planificación Operativa, Paula Zingoni, brindaron detalles de la situación sanitaria de la Ciudad en relación a la curva de contagios, su evolución y el plan de vacunación, en el marco del distanciamiento social, preventivo y obligatorio por el coronavirus.
El funcionario indicó que “hasta el día de hoy hemos confirmado 328.815 casos, de los cuales se han recuperado 278.019 personas, han fallecido 7.891, lo que hace una letalidad para la Ciudad de Buenos Aires de 2,4%”.
El ministro detalló que “hasta el día de hoy hemos realizado testeos a 2.207.025 personas, el 60,9% de ellas residen en la Ciudad de Buenos Aires, tenemos una tasa de positividad del 25,6% y alcanzamos una tasa de test cada 100.000 habitantes de 43.526”.
En cuanto al plan de vacunación contra el coronavirus, Quirós precisó que “hasta el día de hoy hemos recibido 709.700 dosis de vacunas, de las cuales aplicamos 708.936, eso hace un 99,89% de aplicación”.
“Con la primera dosis hemos aplicado 604.800, eso significa que el 49,53% de la población priorizada de la Ciudad de Buenos Aires ya ha recibido al menos una dosis, y el 20,13% de la población general ha recibido al menos una dosis”, agregó.