Ciudad de Córdoba. La transformación de los residuos secos voluminosos en material reciclable, se destina finalmente como donaciones a vecinos, recursos productivos para centros verdes, cooperativas y escombrera municipal, entre otros.
A un mes de su inauguración, el primer Centro de Transferencia, ubicado en Rancagua y Circunvalación, recibió, clasificó y procesó 480 toneladas de residuos secos, que volverán al mercado como recursos productivos siendo parte del proceso de economía circular que impulsa la Municipalidad de Córdoba.
Los materiales que acercan al recinto consisten en: restos de obra y demolición, chatarra, neumáticos, poda, vidrios, neumáticos, electrodomésticos y partes de aparatos tecnológicos, entre otros; ingresados por medio de camionetas, utilitarios, autos, carros, camiones, motos y bolsa de mano.
En su mayor porcentaje, las actividades que realiza la planta se debe a la apropiación y concientización que tienen los vecinos de la ciudad al acercarse y entregar la basura de sus hogares, como también lo llevan a cabo las personas que trabajan manipulando los residuos, los comercios e industrias, jardineros, fleteros y los que se dedican a la construcción.
En este sentido, vecinos de los barrios del sector noreste de la ciudad de Córdoba destinan sus restos secos voluminosos en el Centro de Transferencia Rancagua (CTR), evitando generar y acrecentar los basurales a cielo abierto.
La transformación de los residuos secos voluminosos en material reciclable, se destina finalmente como donaciones a vecinos, recursos productivos para Centros Verdes, cooperativas y escombrera municipal, entre otros.