País. El referente social cuestionó el «nivel de descoordinación» que hay en el Gabinete y consideró que eso «se ordena con alguien de peso que corte el bacalao».
El referente del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) Juan Grabois redobló las críticas al Gobierno albertista por la derrota en las PASO y consideró que «ante el enojo de la gente, alguna cabeza tiene que rodar» en el Gabinete del presidente Alberto Fernández.
«Cuando el pueblo pide sangre, alguna cabeza tiene que rodar ante el enojo de la gente», sostuvo el dirigente social. En declaraciones radiales, el abogado se quejó de que «la política económica del Gobierno es casi neoliberal en algunos aspectos».
Al analizar el desempeño del postulante de La Libertad Avanza Javier Milei en la Ciudad, Grabois consideró que el liberal canalizó el «descontento» y explicó: «Los votos de la Villa 31 y la 15 no son votos de derecha, son votos de gente enojada y que tiene razón».
Respecto a los reclamos al Gobierno, lamentó el «daño» que se le está haciendo «a la coalición política, con un cerco» al jefe de Estado, aunque lo acusó de ser «el máximo responsable» del revés electoral en las primarias del domingo. En ese sentido, el referente del MTE expresó que «reza» para que Alberto Fernández «escuche el grito del pueblo y no se ponga en la actitud defensiva o la negación hipócrita, diciendo escuché y no lo haga».
De cara a las generales del 14 de noviembre, Grabois pidió que «las medidas que se tomen no sean un circo y que las cumplan», tras asegurar que este «es un Gabinete muy porteño»: «A (el jefe de Gabinete) Santiago Cafiero lo respeto, pero para mí el Gabinete no funciona. Hay un nivel de descoordinación que se ordena con alguien de peso que corte el bacalao. (El ministro de Economía) Martín Guzmán es un tipo inteligente, pero le falta calle y formación política».
«Nuestro pueblo le está dando la oportunidad de darse cuenta al Gobierno que está yendo por el camino equivocado», aseguró.
Ante ello, el dirigente kirchnerista reclamó la «urgente» implementación de un «salario universal» como el IFE y la reducción de la carga impositiva a las PyMEs para que pueda generar más trabajo.