País. Luego de las presentaciones de renuncia de funcionarios del riñón kirchnerista, que generó un cimbronazo en el corazón del poder, el Jefe de Estado permanece en la residencia oficial, donde se reunió hoy con el gobernador de San Juan. Pasado el mediodía corría con fuerza la versión de aceptación de la renuncia a De Pedro, pero luego lo desmintió Vilma Ibarra.
Tras la convulsionada jornada del miércoles que vivió el Gobierno, el presidente Alberto Fernández analiza desde la Residencia de Olivos los pasos a seguir. A primera hora estuvo junto a su jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, y luego el titular de ministros se desplazó hasta la Casa Rosada, donde ingresó poco antes de las 11.
Más tarde, el primer mandatario se entrevistó con el gobernador de San Juan, Sergio Uñac, quien le expresó su respaldo en medio de la crisis interna del Frente de Todos.
A raíz de los sucesos de ayer, el jefe de Estado analiza las posibilidades para definir estrategias de cara a lo que queda, en el camino de recuperación para llegar en otras condiciones al 14 de noviembre.
La realidad es que los resultados de las PASO desencadenaron una crisis política en la coalición oficialista y en el corazón mismo del poder que habita Balcarce 50. A la Casa de Gobierno la primera en llegar fue la vicejefa de Gabinete, Cecilia Todesca, y luego lo hizo Cafiero.
La movilización de hoy de organizaciones sociales en “apoyo” a Alberto Fernández, promovida por Fernando “Chino” Navarro, finalmente fue desactivada a pedido del propio Presidente de la Nación. De esta manera se busca apaciguar los ánimos.
Pasado el mediodía de este jueves corría con fuerza la versión de que el Presidente le aceptó la renuncia a Wado De Pedro, pero luego Vilma Ibarra, desde Casa Rosada, desmintió el hecho.