Buenos Aires/País. Katopodis sostuvo que la gente los «va a cagar a palos» por estar ocupados en disputas internas, mientras que Tolosa Paz llamó a bajarle el tono a las confrontaciones en la coalición gobernante.
En medio de la posibilidad lejana de un acercamiento entre el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner, un sector del Frente de Todos pide «desdramatizar las diferencias» y advierte que «es unidad o Macri de vuelta».
«Cuando se cuente que estuvimos casi al borde de una guerra mundial, si se escribe que la dirigencia del Frente de Todos estuvo disputándose en cuestiones internas, bueno, la verdad es que nos van a cagar a palos todos», afirmó el ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis.
En declaraciones radiales, el integrante de la mesa chica del Presidente resaltó: «Es unidad o Macri de vuelta. Tenemos la responsabilidad de conducir al conjunto, no nos van a perdonar que no estemos a la altura».
Para Katopodis, el Frente de Todos fue «la solución que encontró la gente para terminar con (el gobierno de Mauricio) Macri en 2019», lo que definió como «un momento muy difícil de la vida cotidiana de muchos argentinos».
«Nuestro acuerdo con la sociedad fue y es por vía del Frente de Todos, y el dato es que no es una hipótesis que Macri quiera volver. Esta ahí. El macrismo ve la oportunidad de volver, porque ve que el Frente de Todos se puede romper», alertó.
Según su postura, el funcionario consideró «muy importante volver a centrar la discusión». «Nuestra ruptura es con quienes vendieron el país y quieren volver a gobernar para hacer lo mismo, pero más rápido», enfatizó.
En la misma sintonía, la diputada nacional Victoria Tolosa Paz llamó a «desdramatizar las diferencias» en el frente oficialista, y destacó que «el verdadero enemigo es el macrismo».
«Tenemos diferencias que ya fueron tratadas en el Congreso, pero para adelante tenemos que tener la capacidad de ponernos de acuerdo hacia adentro del Frente», declaró Tolosa Paz a la prensa.
En línea con el discurso albertista, la parlamentaria bonaerense señaló que el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional «abre una ventana de cuatro años y medio para la Argentina», en cuyo periodo «no tendrá que destinar un solo dólar para el pago de la deuda que tomó el gobierno de Mauricio Macri».