Con Batakis en Estados Unidos, el Gobierno sale a buscar $320.000 millones

País. Se abre una nueva licitación de deuda en pesos el miércoles y el jueves en medio de un clima financiero enrarecido.

La ministra de Economía de la Nación, Silvina Batakis, quien se encuentra en Washington tratando de lograr alguna señal de respaldo del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Tesoro de los Estados Unidos, enfrentará en Buenos Aires un desafío clave cuando entre el miércoles y el jueves se realice una nueva licitación de deuda por $320.000 millones.

Según cómo salga parada de ese desafío, los mercados medirán cuánto margen le queda al Gobierno de Alberto Fernández para seguir manejando la crisis de confianza con medidas en grageas, a la espera de que se resuelva la interna política.

La semana pasada, el Palacio de Hacienda arrancó con el desafío de conseguir pesos en el mercado para refinanciar los vencimientos de julio que superaban los $480.000 millones, y a la ministra de Economía no le fue mal.

Según plantea la consultora Equilibra, que dirige el economista Diego Bossio, la flamante ministra tuvo “una primera licitación de deuda en pesos exitosa” ya que “se colocaron más de $135.000 millones, lo que representa casi $125.000 millones de financiamiento neto.  

Pero el Tesoro debió convalidar tasas significativamente mayores a las últimas colocaciones.

En la subasta de este miércoles 27, el Tesoro buscará refinanciar unos $320.000 millones. Los vencimientos del segundo semestre suman unos $4 billones, de los cuales se estima que unos $1,3 billones están en manos privadas y más de dos tercios corresponden a instrumentos indexados al CER. 

No obstante, la convocatoria se llevará a cabo en un contexto de tensión, en el cual el Gobierno no termina de definir un rumbo que le permita aplacar la incertidumbre de los mercados y ni que hablar del proceso inflacionario sin tregua.

Un punto a favor con el que cuenta el equipo económico es que la corrida contra los bonos del Tesoro que dominó todo junio, y que llevó a generar dudas sobre la posibilidad de algún reperfilamiento de vencimientos quedó conjurada, al costo de una emisión de casi $2 billones del Banco Central para defender el valor de los títulos en el mercado secundario, consignó NA.

Por otro lado, la entidad mnetaria salió a ofrecer un instrumento financiero del segmento de derivados, que opera como un seguro, para que los bancos participen en las licitaciones y queden a resguardo en caso de una devaluación y una posterior escapada de la inflación.