
País. La bancada oficialista logró su objetivo, acompañado por un puñado de legisladores radicales que responden a los gobernadores radicales Morales y Valdés, el interbloque Federal (integrado por Córdoba Federal) y Provincias Unidas. Con el número justo, el FdT consiguió dar media sanción a la prórroga de impuestos.
Pese al rechazo del grueso de los diputados de Juntos por el Cambio, el Frente de Todos logró en ayer convertir en ley el Consenso Fiscal firmado el 27 de diciembre pasado entre el presidente Alberto Fernández y 21 gobernadores del oficialismo y la oposición.
Con 136 votos a favor, 108 en contra y cuatro abstenciones, el oficialismo consiguió su objetivo, acompañado por un puñado de legisladores radicales que responden a los gobernadores radicales Gerardo Morales y Gustavo Valdés, el interbloque Federal (integrado por los tres diputados schiarettistas) y Provincias Unidas.
Por el rechazo se pronunciaron la abrumadora mayoría de Juntos por el Cambio, el Frente de Izquierda y los dos bloques de la derecha liberal (Avanza Libertad y La Libertad Avanza).
Los radicales que votaron a favor fueron los jujeños Gustavo Bouhid y Jorge Rizzotti, el correntino Jorge Vara, el mendocino Julio Cobos, y el formoseño Fernando Carbajal. Sorpresivamente se sumó a los votos positivos la diputada del PRO Sofía Brambilla. Se abstuvieron los radicales de Mendoza Lisandro Nieri, Jimena Latorre y Pamela Verasay, y el catamarqueño Francisco Monti.
La iniciativa había sido incluida por el Poder Ejecutivo en el temario de sesiones extraordinarias del Congreso, pero el tema nunca llegó a tratarse durante el verano.
Con este pacto, las provincias quedan habilitadas para aumentar algunos impuestos locales, entre ellos los de Ingresos Brutos y a los Créditos y Débitos Bancarios (Sellos), aunque con topes máximos.
Entre otros aspectos que hacen al ordenamiento tributario, el nuevo consenso fiscal dispone que las alícuotas de Ingresos Brutos no puedan exceder a las fijadas para cada actividad y además ratifica la decisión de evaluar durante este año la posibilidad de legislar sobre un impuesto a la herencia.
También contiene un capítulo denominado de «endeudamiento responsable», que dispone que las provincias podrán aumentar el stock de deuda denominada en moneda extranjera solo a través de líneas de financiamiento con organismos bilaterales o multilaterales de crédito.
En tanto, en materia de responsabilidad fiscal, la iniciativa estipula que «la regla de límite de crecimiento del gasto estará regida en todos los casos por el incremento del PBI».
En cuanto al impuesto a los sellos, se estableció una alícuota máxima del 3,5% a la transferencia de inmuebles; del 3% a la transferencia de automotores; y del 2% a los restantes actos, contratos y operaciones alcanzadas por este tributo en general.
No estarán sujetos a alícuota máxima los actos, contratos y operaciones relacionados con las actividades de loterías y los juegos de azar. Además las provincias podrán elevar más allá del máximo de 2% el impuesto inmobiliario.
Expresiones

Como miembro informante, el diputado Carlos Heller (FdT), titular de la Comisión de Presupuesto y Hacienda, defendió la iniciativa al ratificar que “de ninguna manera el objetivo de este consenso es subir impuestos”. Al respecto, subrayó que “no se puede hablar de inclusión, sino se habla de distribución”.
“Debemos establecer una estructura impositiva orientada a la promoción de la inversión, del crecimiento económico con equidad e inclusión y a la generación de empleo formal en todas las jurisdicciones”, remarcó Heller, al tiempo que afirmó que “el objetivo es seguir avanzando en forma gradual y sostenida en recortar la diferencia de desarrollo económica y social que existen hoy entre las distintas regiones de nuestro país”.
Al rechazar “absolutamente de plano” el proyecto y defender el dictamen de minoría, Luciano Laspina (PRO), señaló que “este consenso fiscal vuelve a repetir el principio de salvación de la política sacrificando a los contribuyentes”. Sobre ese aspecto, sentenció: “Acá nos votaron para defender a los ciudadanos de a pie y no a los gobernadores de nuestras provincias”. “Este nuevo consenso es un clavo más en el ataúd del desastre fiscal y tributario de la Argentina”, fustigó.
El diputado Carlos Gutiérrez, titular del bloque Córdoba Federal, sostuvo que “aún con todo lo que nosotros estamos planteando de lo que falta discutir de fondo en una reforma tributaria, es que vamos a apoyar este consenso fiscal”.
Desde el bloque Provincias Unidas apoyaron el proyecto, mientras que el Frente de Izquierda rechazó el texto. El diputado Nicolás del Caño (PTS-FIT UNIDAD), en particular, consideró que “es una ley hija directa del acuerdo con el FMI”. “Pongamos los recursos del país no para los sojeros, no para los bancos, sino al servicio de las grandes mayorías”, dijo.
Desde Avanza Libertad, José Luis Espert se preguntó “cuál es la lógica de firmar algo que no tiene ninguna penalidad, por lo tanto, es irrelevante lo que estamos tratando desde el punto de vista jurídico”. “En los hechos hay una especie de cartelización fiscal entre las provincias para esquilar a los ciudadanos”, agregó.
Prórroga de impuestos
Por otro lado, Diputados aprobó en los últimos minutos del jueves y envió al Senado el proyecto de ley que propone la prórroga por cinco años la vigencia de los impuestos, a las Ganancias, a los Débitos y Créditos Bancarios, conocido como Ley del Cheque, y del Monotributo, Capital de la Cooperativa y adicional de Cigarrillo que vencen a fines de 2022, que representan 32% de la recaudación impositiva actual; así como las asignaciones específicas a las que se afectará lo tributado por algunos de esos ítems.
En la votación en general, la iniciativa sumó 129 votos a favor, ya que al FdT se sumaron los respaldos de Provincias Unidas, Interbloque Federal, Movimiento Popular Neuquino; 100 en contra, en su mayoría de Juntos por el Cambio; 18 abstenciones y nueve ausencias.
El proyecto fue incluido en el temario luego de que el oficialismo decidiera anoche pedir ampliar la citación para incorporar esta iniciativa clave que se debate en la misma jornada en que ingresa el Presupuesto 2023 diseñado por el Ministerio de Economía que encabeza Sergio Massa, y cuya recaudación ya fue incluida en las previsiones de gastos y recursos para el próximo año.