
País. Dicho foro organizado por el C3 congregó a más de un centenar de jóvenes que vivieron una experiencia científica-artística-educativa única en torno a la crisis ambiental.
El Foro «Estamos al horno», organizado por el Centro Cultural de la Ciencia C3, reunió por espacio de tres días a 130 adolescentes, de 16 a 18 años, de distintos lugares del país para conversar y debatir sobre cambio climático con la participación de expertos quienes compartieron conocimientos y experiencias.
Como cierre de las jornadas, se creó un manifiesto colectivo de jóvenes C3, el cual fue entregado el último día al titular de Ciencia, Daniel Filmus, y su par de Salud, Carla Vizzotti.
Tras recibir el manifiesto, Filmus expresó que «hay que dar una lucha para que estas cosas sean ciertas porque cuando discutimos del otro lado hay intereses». «Esta semana no salió la ley de humedales y hay intereses que no quieren que salgan estas cosas; hay que dar una lucha”, acentuó y subrayó “el aporte de la ciencia y la tecnología nos permite ser más cuidadosos con el ambiente. Nosotros le pertenecemos a la Tierra”.
“Hoy la salud es colectiva, es transversal y trasciende al equipo de salud. La salud ambiental es un ejemplo muy claro de eso e involucra a todos los sectores. Lo vimos en la pandemia, pudimos hacer esa articulación en la pandemia y lo queremos sostener más allá de la pandemia, la salud ambiental en esto es muy importante”, sostuvo Vizzotti.
En tanto, la presidenta del CONICET, Ana Franchi, celebró la iniciativa, llamó a que se multipliquen y destacó el compromiso de los y las jóvenes, y agregó que «es indispensable que la ciencia sirva siempre para mejorar la calidad de vida de todos y todas. Tenemos que construir un mundo mejor, es el único que tenemos y para eso es indispensable que trabajemos con compromiso y en conjunto».
Por su parte, la directora de Desarrollo de Museos, Exposiciones y Ferias del Ministerio de Ciencia, a cargo de la dirección del Centro Cultural de la Ciencia C3, Guadalupe Díaz Costanzo, señaló que este foro nació con el objetivo de «habilitar espacios públicos para legitimar estos debates y consensos del que todos y todas debemos ser parte para poder enfrentar el cambio climático”.
Manifiesto colectivo

El texto fue creado por los y las participantes inspirado en el cambio climático y los impactos que está sufriendo el mundo. “Sabemos que enfrentar el cambio climático no será fácil si no es prioridad en la agenda política, si no se destinan recursos, por la indiferencia de algunas personas, por la represión a activistas, la falta de compromiso, el lobby y los intereses personales, sectoriales y económicos, por la falta de aplicación de leyes de cuidado ambiental”, señalan en el texto.
El manifiesto incluye qué esperan, qué hacen, qué exigen y qué proponen como solución; en palabras de ellos/as, “queremos un planeta con justicia ambiental, sin desigualdades, inclusivo, con aire fresco y verde, ecofeminista, democrático, seguro e igualitario, pluricultural, que la población reciba el beneficio de la ciencia y que la ciencia sea comprometida e interdisciplinaria”.
Mucho para procesar
Distintos momentos y actividades estuvieron pautados para los tres días del foro. Los y las adolescentes provenientes de Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Moreno, Lanús, Berazategui, Pilar, Quilmes, Morón, José C. Paz, La Matanza y Allen (Provincia de Río Negro) participaron de charlas científicas a cargo de especialistas, talleres de producción con la mediación de comunicadores de la ciencia, rondas de conversación en clave creativa y a medida que adquirían conocimiento se iba confeccionando el manifiesto para llevarlo finalmente a una puesta en común. Además, hubo espacios musicales y de distensión, ya que las ideas no llegan solas y había mucho por elaborar.
El foro contó con la apertura del divulgador científico Diego Golombek y el acompañamiento de los copilotos (guías del C3) Gonzalo Rodriguez Rizk y Clara Sacks, y numerosos educadores junto al grupo Iconoclasistas, laboratorio de comunicación social formado por Julia Risler y Pablo Ares.
El evento tuvo dos grandes charlas científicas abordadas desde una mirada interdisciplinaria que permitieron a los/as participantes empaparse de información para luego bajar lo aprendido en instancias de diálogo como así también rondas de conversación con talleristas.
La iniciativa buscó potenciar el diálogo entre jóvenes y el sistema científico y tecnológico, y constituir una red de intercambio entre ellos ya que serán los agentes de cambio.