País. «Era un supuesto asesor pero no hay registro de que haya venido o lo hayamos visto en Tucumán junto a Bussi», argumentó el legislador provincial del FdT Gerónimo Vargas Aignasse.
El legislador provincial tucumano del Frente de Todos (FdT) y jefe regional del Norte Grande del Ente Nacional de Obras Hídricas y de Saneamiento (Enohsa), Gerónimo Vargas Aignasse, denunció este domingo que el diputado Javier Milei «fue ñoqui de Fuerza Republicana en la Cámara de Diputados de la Nación» y lo criticó por haber encabezado un acto en esa provincia junto al legislador Ricardo Bussi, hijo y heredero político del represor Antonio Bussi, condenado por crímenes de lesa humanidad.
En diálogo con Télam desde Tucumán, el funcionario nacional aseguró que cuando Bussi padre «era diputado nacional, este hombrecito fue empleado de él», en referencia a Milei, líder del espacio La Libertad Avanza.
Gerónimo Vargas Aignasse, en uso de licencia como legislador provincial para desempeñarse como jefe regional de Enohsa-Norte Grande, es hijo de Guillermo Vargas Aignasse, senador nacional asesinado en la dictadura, por cuyo crimen Antonio Bussi fue condenado a reclusión perpetua y murió en la cárcel.
«Claramente vino a devolver favores a Tucumán, a fortalecer un partido con un origen antidemocrático fundado por un genocida condenado por la Justicia a reclusión perpetua, quien le dio un contrato en la década del ’90», dijo Vargas Aignasse en referencia a Milei y a Fuerza Republicana, donde hoy milita Ricardo Bussi.
Señaló que el economista liberal «fue ñoqui de Fuerza Republicana en la Cámara de Diputados de la Nación: era un supuesto asesor pero no hay registro de que haya venido o lo hayamos visto» en Tucumán junto a Bussi.
«Hoy hace política desde la antipolítica y no le cuenta a los tucumanos que fue ñoqui de Fuerza Republicana. Esa parte de la historia no la cuenta, que sepan los tucumanos que cobraba en el Congreso sin hacer nada», siguió el funcionario.
Y le pidió «que sortee también lo que cobró sin trabajar hace algunos años», en referencia a su costumbre actual de sortear su salario político entre sus seguidores.