País. «Es altamente probable, entonces, que estas dos personas (en referencia a Sabag Montiel y Uliarte) formaran parte o tuviesen vínculos directos» con la organización liderada por Jonathan Morel, señaló la vicepresidenta en la presentación ante la Justicia a la que tuvo acceso Télam.
La vicepresidenta Cristina Kirchner consideró que «es probable» que Revolución Federal o algunos de sus miembros hayan participado del intento de atentado en su contra perpetrado el 1 de septiembre.
Así surge del escrito presentado el pasado lunes 17 por los abogados de la vicepresidenta, José Manuel Ubeira y Marcos Aldazabal, con el que solicitaron (y lograron) que sea tenida por querellante en la causa en la que se investiga a Revolución Federal.
«Es probable que el accionar del grupo no se limitara a amenazas, instigaciones y preparación de delitos en abstracto, sino que haya participado específicamente en el intento de atentado en mi contra«, sostuvo la titular del Senado en el escrito que sus abogados le presentaron al juez federal Marcelo Martínez de Giorgi.
En el texto de 7 páginas al que Télam tuvo acceso, los letrados enumeraron una serie de eventos violentos de los que participó la organización autodenominada Revolución Federal, a la vez que recordaron que en sus respectivos perfiles de redes sociales los referentes de ese espacio proponían consignas como «Bala a los kirchneristas» o «Haga patria, persiga al kirchnerismo».
La vicepresidenta recordó en el escrito que «solo cinco días antes del atentado» que sufrió en la puerta de su casa en Recoleta, Revolución Federal realizó una charla vía Twitter en la que uno de sus dirigentes, Jonathan Morel, detenido en el marco de la investigación, hacía referencia a la posibilidad de infiltrarse entre los manifestantes que habían ido a brindarle su apoyo.
Tras repasar los actos violentos y las expresiones de Revolución Federal, Fernández de Kirchner sostuvo que encuentra «probable» que Fernando André Sabag Montiel y Brenda Uliarte, los dos procesados como coautores del intento de magnicidio, tuvieran vínculos con Revolución Federal.
«Respecto de los hechos conocidos públicamente, es también alarmante la probable financiación de este grupo violento, que quería acabar con mi vida, por parte de personas pertenecientes a la oposición al gobierno del que formo parte», sostuvo la expresidenta en referencia a la información que indica que Jonathan Morel cobró cifras millonarias de la firma Caputo Hermanos por supuestos trabajos de carpintería.