
País. El referente de la bancada Evolución Radical pedirá el apartamiento de la oficialista por adelantar posición, lo que implica que «no se garantizará la objetividad e imparcialidad del proceso».
En medio de la polémica por la embestida del Gobierno de Alberto Fernández contra los miembros de la Corte Suprema de Justicia, que instrumentará el Frente de Todos en Diputados, el jefe de la bancada Evolución Radical, Rodrigo de Loredo, desplegó su avanzada para desplazar a Carolina Gaillard de la presidencia de la comisión por donde pasará el debate central del juicio político al máximo tribunal.
El parlamentario cordobés adelantó este martes que desde su espacio van a pedir «el apartamiento de la presidenta de la comisión de Juicio Político Carolina Gaillard». El radical basó su planteo en las declaraciones vertidas a la prensa de la legisladora albertista que «dan cuenta que no se garantizará la objetividad e imparcialidad del proceso».
«El adelanto de opinión pone en riesgo garantías consagradas en el artículo 18 de la Constitución Nacional como la de ser juzgado por un tribunal imparcial. Ningún juzgador judicial o administrativo puede ser parcial», afirmó.
«No se recogió prueba alguna, no se escuchó a los acusados, no ingresó ni siquiera formalmente el pedido a la Cámara pero ya hay un final cantado», advirtió De Loredo al poner el foco en las expresiones condenatorias de Gaillard hacia los miembros del alto tribunal.
En ese sentido, el titular de la bancada radical que integra el interbloque Juntos por el Cambio aseguró: «No habrá argumento o elemento probatorio o circunstancia alguna que le hagan cambiar de opinión a la diputada Gaillard».
«Esto ratifica que se han vulnerado flagrantemente las garantías procedimentales de los acusados», sentenció el legislador opositor en la previa de lo que será el debate en la comisión de Juicio Político de la Cámara Baja.
Por último, De Loredo enfatizó que «los jueces de la Corte que fueron denunciados penalmente por las mismas causas por las que ahora se los pretende juzgar políticamente, no están obligados a comparecer ni siquiera de forma escrita porque nadie puede ser obligado a declarar contra sí mismo».