Mundo. Europa y Medio Oriente recibirán el mismo número de turistas internacionales que antes de la pandemia, prevé la agencia de la ONU especializada en el sector, aunque la situación económica lleva a los viajeros a destinos más cercanos. En América Latina, la agencia suma fuerzas con un banco de desarrollo regional para impulsar la inversión en turismo sostenible.
La Organización Mundial del Turismo (OMT) estimó que las llegadas de turistas internacionales podrían situarse entre el 80% y el 95% de los niveles prepandémicos en 2023, dependiendo de la magnitud de la desaceleración económica, de cómo se vayan recuperando los viajes en Asia y el Pacífico y de cuál sea la evolución de la guerra en Ucrania, entre otras variables.
De acuerdo con la OMT, más de 900 millones de turistas hicieron viajes internacionales en 2022, el doble que en 2021, aunque la cifra representa apenas el 63% de los niveles anteriores a la pandemia.
Los datos muestran que todas las regiones del mundo registraron incrementos notables en las cifras de turistas internacionales.
Medio Oriente tuvo el mayor incremento relativo, con llegadas equivalentes al 83% de las cifras prepandémicas. Europa casi logró el 80% de los niveles previos a la pandemia, con 585 millones de llegadas en 2022.
África y América recuperaron alrededor del 65% de los visitantes prepandémicos, mientras que Asia y el Pacífico sólo recobró el 23%, al mantener medidas sanitarias más estrictas que empezó a relajar sólo en los últimos meses.
La OMT reportó que el incremento de los ingresos por turismo internacional observados en la mayoría de los destinos ha sido notable, y ha superado en varios casos al de las llegadas gracias al aumento del gasto medio por viaje en vista de que los periodos de estancia se han alargado, de que los viajeros gastan más en sus destinos y de que la inflación ha incrementado los costos.
No obstante, ante estos factores favorables, el organismo advirtió que la situación económica podría provocar en los turistas una actitud más precavida en 2023, con un menor gasto, y viajes más cortos a destinos más cercanos.
Además, consideró que la continua incertidumbre causada por la guerra en Ucrania y otras tensiones geopolíticas crecientes, así como los desafíos sanitarios relacionados con el COVID-19 suponen riesgos de empeoramiento y podrían pesar en la recuperación del turismo en los próximos meses.
Una nueva asociación
Por otra parte, la OMT anunció este jueves un nuevo acuerdo de cooperación con el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF) que buscará apoyar la recuperación del sector turístico y concretarlo como un rubro más sostenible y resiliente.
La asociación se dio a conocer en el marco de la Feria Internacional del Turismo, en Madrid, España, donde la OMT acogió a altos representantes de los Estados Miembros de América Latina y el Caribe, al igual que a ejecutivos del sector privado.
La OMT insistió en la importancia de las inversiones para desarrollar un sector turístico más sólido, sostenible y resiliente.
Según el nuevo acuerdo, las entidades elaborarán conjuntamente una serie de directrices generales de inversión turística que, por ahora se enfocarán en cinco países: Ecuador, Uruguay, Panamá, El Salvador y Barbados.
Además, diseñarán estrategias que atraigan, promuevan y retengan la inversión extranjera directa en iniciativas de turismo sostenible con el propósito de acelerar la recuperación económica y fomentar la sostenibilidad y la resiliencia en todo el rubro.