País. Fue en el marco de la presentación del libro PISAC COVID-19 en la Feria del Libro de Buenos Aires, que reúne las conclusiones, aportes y propuestas de 19 investigaciones.
El ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, afirmó que «el Estado estuvo presente» durante la pandemia de coronavirus, pero reconoció -según una de las principales conclusiones del estudio- que «no fue suficiente», y atribuyó esa realidad a la herencia recibida de la administración anterior.
«Eso tuvo que ver con que el Estado que heredamos del gobierno neoliberal de (Mauricio) Macri no tenía las condiciones previas para atender las demandas en los distintos niveles», destacó el funcionario K en el marco de la presentación del libro “PISAC COVID-19: La sociedad argentina en la postpandemia” en la Feria Internacional del Libro en Buenos Aires.
«No alcanza con un Estado de políticas de Estado presente, hay que saber cómo hacerlo, cómo resolver los problemas de nuestra gente. En ese saber hacer para disminuir las desigualdades que la pandemia agudizó, los científicos sociales tenemos muy buenos aportes para hacer», dijo Filmus en otro tramo de su intervención.
A su vez, sostuvo que «debemos discutir cómo, con las herramientas que se han desarrollado en el PISAC, podemos desarrollar políticas concretas. Es imprescindible potenciar la integración entre la gestión pública y la investigación para impulsar políticas que resuelvan los problemas de la sociedad”.
La convocatoria PISAC COVID-19 fue un llamado organizado por la Agencia I+D+i -con apoyo del MinCyT y CODESOC- a proyectos asociativos de investigación en Ciencias Sociales y Humanas para la generación de nuevos conocimientos enfocados en el estudio de la sociedad argentina en la pandemia y la postpandemia de COVID-19.
Más de 6.700 investigadores de todo el país elaboraron 90 propuestas de proyectos en red para investigar los nuevos escenarios. Dada la gran cantidad de proyectos recibidos, la Agencia I+D+i decidió ampliar el presupuesto destinado a la convocatoria. Los proyectos fueron evaluados por una comisión ad hoc de 24 especialistas y se seleccionaron 19 propuestas.
A su turno, la ministra de Salud de la Nación, Carla Vizzotti, destacó la importancia de la publicación de este libro y remarcó el trabajo conjunto desarrollado con el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación y la Agencia I+D+i. “En medio de la crisis humanitaria más grande que tuvimos en los últimos cien años, el Estado estuvo presente y articulando. En ese sentido, las universidades; las investigadoras y los investigadores; las científicas y los científicos, se reformularon para dar respuesta en la pandemia”, aseguró.
Como ejemplo, la titular de la cartera sanitaria mencionó, entre otros, el desarrollo de la vacuna argentina, que ya se encuentra en su ensayo clínico final; la elaboración de barbijos; y la producción de kits de diagnóstico. “Pero además todas las áreas de las ciencias sociales se pusieron a pensar y el resultado es este trabajo que estamos presentando hoy, que ha tenido impacto en la vida de la gente y fue parte de la toma de decisiones en forma oportuna y en tiempo real. Eso es lo que salva vidas y lo que hace que todo el universo científico y el equipo de salud confíe en las recomendaciones”, señaló.
“También fue una decisión política que las decisiones se tomen basadas en evidencia local y no en un paper de Estados Unidos o Europa”, dijo la ministra, quien explicó que esa información fue muy útil además para otros países de la región.
“Por eso celebro este trabajo colectivo de nuestro país que tiende puentes a la región, celebro esa mirada de acceso gratuito para que este libro se difunda y divulgue, y celebro todo lo que somos capaces de hacer con un Estado presente, eficiente y articulado”, cerró.
Por su parte, el presidente de la Agencia I+D+i, Fernando Peirano, destacó que “la experiencia de Pisac COVID nos llena de orgullo y nos deja mejor preparados para enfrentar una batalla difícil. Enfrentar a los adversarios del desarrollo que tiene nuestro país, que muchas veces se expresan directamente en el plano político planteando un país que no necesita ciencia y tecnología, un país donde las necesidades se tienen que resolver por el mercado”.
“¿Cuánto de esto podemos capitalizar y aprovechar para luchar contra este adversario del desarrollo que muchas veces nos frustra y marca una gran brecha entre lo que queremos hacer y lo que podemos hacer? Tenemos que revisar nuestras instituciones, nuestros procesos, nuestras reglas, nuestra forma de trabajo. Lo hemos podido hacer cuando las exigencias así lo reclamaban. Hagámoslo por convicción y para tener un país realmente federal, con perspectivas diversas y sobre todo con un desarrollo inclusivo”, concluyó.