País. El titular de la UCR nacional defendió la idea de incorporar al peronista Juan Schiaretti, aún con el rechazo categórico del radicalismo y de la fuerza amarilla de Córdoba.
El presidente de la UCR nacional, Gerardo Morales, apuntó a la precandidata presidencial Patricia Bullrich, a quien tildó de «soberbia», y sostuvo que el espacio «está en picada desde hace tres meses por culpa de la interna del PRO».
«Tenemos que consolidar y ampliar Juntos por el Cambio, que viene sometida desde hace tres meses a una interna que cada vez está mas dura, entre Patricia y Horacio (Rodríguez Larreta), sobre todo de lado de Patricia, que la veo soberbia», resaltó el radical en declaraciones a la prensa al ingresar el encuentro en la sede del partido.
Ante la consulta sobre el rechazo de Luis Juez, Morales sostuvo que «no modifica la situación de Córdoba» y que ya hablarán con el candidato de Juntos por el Cambio en su momento. «La incorporación de Schiaretti nos fortalece», subrayó el jefe de la UCR y precandidato presidencial.
La incorporación del peronista cordobés genera tensión y ruido interno en los cambiemitas en territorio mediterráneo que atraviesan la campaña electoral para destronar del poder al PJ provincial que lleva 24 años de gobierno. La UCR y el PRO de Córdoba expresaron su rechazo a la posibilidad de que Schiaretti se sume a Juntos por el Cambio.
«Hace tres meses que venimos en picada por culpa de la interna del PRO, que Bullrich baje un cambio antes de descalificar», enfatizó Morales en medio del fuerte debate que fogonea el líder del PJ cordobés en su estrategia de dividir al frente opositor.
«Tiene que haber unanimidad» para incorporar socios, aclaró Morales, algo imposible de lograr en el caso de Schiaretti. De todos modos, el jujeño apuntó duro contra Bullrich, al advertir que «está apelando a lo peor, que es descalificar para poder ganar el debate».
«Yo no le voy a contestar, que baje un cambio, que baje los decibeles, ya empezó a hacerlo con Larreta, pero ahora conmigo», aseguró el referente radical, quien también desoye la posición de su partido en Córdoba.