País. El mandatario pidió a Morales que no use a los jujeños como «banco de pruebas de la represión». El Gobierno nacional puso el foco en los artículos de la reforma de la carta magna de Jujuy que «violan la Constitución Nacional y los tratados internacionales».
El presidente Alberto Fernández repudió los “hechos de represión y violencia estatal” acontecidos en Jujuy, instó al gobernador Gerardo Morales a “cumplir con los estándares internacionales de derechos humanos”, y adelantó que la administración central iniciará “acciones judiciales y legislativas” para garantizarlos, en caso de no cesar la violencia en esa provincia.
Así se pronunció el mandatario en la tarde de este miércoles en Casa Rosada, en el marco de una declaración oficial que brindó sobre el conflicto en la provincia de Jujuy, en la que además sostuvo que instruyó al ministerio de Justicia para pedir la inconstitucionalidad de los artículos de la reforma votada en Jujuy “que violan la Constitución Nacional y los tratados internacionales”.
También pidió a Morales que «no utilice al pueblo» de esa provincia como «banco de prueba de represión y saqueo que determinados sectores políticos pretenden llevar adelante», y afirmó que esa administración contará con el «apoyo» del Gobierno nacional si se decide a promover un diálogo.
Fernández reiteró el pedido para que el mandatario jujeño «convoque a las comunidades indígenas y a todos los actores sociales a encontrar caminos de diálogo para superar el conflicto que ha provocado con acciones antidemocráticas».
«Quiero que sepa el señor Gobernador que para ello cuenta conmigo personalmente y con el apoyo del Gobierno nacional. Siempre que convoque al diálogo va a tener ayuda», subrayó el titular del Poder Ejecutivo nacional.
Remarcó que «los hechos de represión y violencia estatal sucedidos en Jujuy son inadmisibles en nuestra vida democrática», a tal punto que «ha provocado la alerta y la condena de los organismos internacionales defensores de los derechos humanos.
En su pronunciamiento, el Presidente enfatizó: «Respetamos el federalismo y la autonomía de las provincias, pero de no cesar los hechos de represión iniciaré las acciones judiciales y legislativas necesarias para garantizar los derechos humanos en la provincia de Jujuy».
Por otro lado, Fernández informó que el Ejecutivo nacional envió «a Jujuy funcionarios de la secretaría de DDHH, la Agencia de Asuntos Indígenas y la Agencia Nacional de Discapacidad».
En ese plano, indicó que el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti, «estuvo en Jujuy desde el primer, volvió a Buenos Aires a informarme sobre la crítica situación y por mi instrucción ya ha regresado a la provincia para acompañar a las comunidades, conocer de cerca el acontecer de los hechos y además ver el estado en que se encuentran las personas detenidas».