
Ciudad de Córdoba. A 19 días de los comicios capitalinos, la campaña entró en el terreno de los cruces de acusaciones entre los principales postulantes a la intendencia.
A menos de 20 días de las elecciones municipales, la campaña entró en el terreno de los cruces de acusaciones entre el candidato a intendente de Juntos por el Cambio Rodrigo de Loredo y el postulante oficialista, el actual viceintendente Daniel Passerini.
El problema de la inseguridad que aqueja a los vecinos se metió de lleno en la etapa proselitista, de cara a la contienda electoral del 23 de julio. La iniciativa de De Loredo de impulsar -en el caso de llegar al Palacio 6 de Julio- el traspaso de la Policía a la ciudad de Córdoba, abrió el debate con duras críticas entre ambos espacios políticos.
El radical evolucionista propuso el traspaso de los más de diez mil agentes policiales que operan en la Capital, con sus recursos e infraestructura, para «hacerse cargo» de la seguridad de la Capital.
Al anunciar ayer esta medida -a modo de iniciativa de campaña- ante empresarios en la Bolsa de Comercio, De Loredo disparó su cuestionamiento al peronismo en el poder al afirmar que «tras 24 años no lograron resolver este tema. Por qué ahora le tengo que creer que lo van a saber hacer».
El intendente Martín Llaryora y su vice, Daniel Passerini, salieron al cruce de la propuesta del candidato opositor. Ambos, rechazaron la iniciativa del radical al calificarla de insuficiente y de difícil instrumentación en la práctica.
«No se condice para nada con una mejora, porque él (por De Loredo) sólo pretende cambiarle el color del uniforme a 10 mil policías que ya están. Y que, evidentemente, son insuficiente en la ciudad», afirmó Passerini.
En contraposición, el postulante oficialista aseguró: «Nosotros proponemos incrementar la cantidad de efectivos en la calle con una fuerza propia, que no use armas letales, que tenga articulación con la fuerza policial anti narcotráfico, que tenga movilidad propia, y que este complementada con la Policía».
«Esto es realmente algo que va a mejorar la seguridad y no lo que dice» el postulante opositor en su propuesta, remarcó el dirigente delasotista.
Por su parte, el intendente y gobernador electo criticó la propuesta del evolucionista y advirtió: «Si yo paso 10 mil policías de la órbita provincial a la municipal, no sumamos ningún policía. Seguimos teniendo la misma cantidad de policías«.
Sostuvo además que «hay que modificar la Constitución para eso. Porque nuestra Constitución hoy lo impide. Eso nos va a llevar uno o dos años», aseveró Llaryora, e insistió en su propuesta de una guardia urbana municipal equipada con armas no letales.
Llaryora y Passerini se pronunciaron de esta manera en la mañana de este martes, minutos antes que, junto al gobernador Juan Schiaretti, dejaran habilitado el colector cloacal de barrio Empalme y anunciaran la ampliación del servicio.
En ese marco, el gobernador electo enfatizó, en clave electoral, que «para continuar necesitamos que el equipo municipal siga, que no vengan los equipos que llevaron a Córdoba al atraso y que fracasaron en la ciudad. Que siga este equipo, pero también sabiendo que yo, como lo hizo Juan, estaré apoyando este crecimiento y las obras en la ciudad».