País. El precandidato a presidente aseguró que, de perder la interna con Sergio Massa, acompañará la campaña de Unión por la Patria de cara a octubre.
El precandidato a presidente de Unión por la Patria Juan Grabois afirmó que su lista se acerca más «al pensamiento y la acción política» de la vicepresidenta Cristina Kirchner que la de su rival en la interna Sergio Massa y prometió la unidad a pesar de salir derrotado en las PASO.
«Si no estuviera garantizada la unidad iría por afuera. Si en una interna el que pierde no acompaña, sería una estafa«, expresó el dirigente social, y agregó: «Está absolutamente garantizado en mi caso, me gustaría que lo esté en el caso de que a mi rival le toque perder, que no lo escuché decir que me acompañaría».
En la misma línea, detalló que en octubre, de cara a las generales, el objetivo del oficialismo será «ganarle a la derecha neoliberal, a los sectores nazis, fascistas, violentos» y para eso, su espacio militará «con toda la fuerza al candidato que haya salido de Unión por la Patria».
El titular del Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) expresó que la fórmula que integra junto a Paula Aval Medina, defiende «a los de abajo y a los del medio», y subrayó: «Somos por lejos la lista que está más cerca del pensamiento y la acción política de Cristina Kirchner«.
«Estuvimos en las malas, mientras otros estaban en Davos, porque vamos a voltear a la mafia judicial, porque somos coherentes en nuestra historia, tenemos corajes y sentimos lo que le pasa a nuestro pueblo», destacó Grabois en declaraciones a C5N.
Si bien evitó dar detalles de las charlas que mantiene con la vicepresidenta, el precandidato confesó que «no fue magia» el llamado a una interna, y acentuó: «Existen PASO porque la conducción del movimiento nacional y popular definió que lo mejor es que haya opciones».
«Todos sabemos que la forma de derrotar al macrismo es juntar la mayor cantidad de votos entre las dos tendencias que hay en Unión por la Patria», aseveró.
Según advirtió, si su espacio logra hacer una buena elección, aunque no se imponga en la primera, tendrá la fuerza suficiente para marcar el rumbo en la Argentina y «evitar que haya alguien que tiene el monopolio de la representación».