
Córdoba. La medida de la cartera laboral se establece por un período de 15 días hábiles a partir de las 00 horas de este miércoles, en cuya jornada, la UEPC había convocado a un paro de 24 horas, con movilización.
El ministro de Trabajo de la Provincia, Omar Sereno, dispuso este lunes la conciliación obligatoria entre la administración schiarettista y la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC), ante el conflicto salarial por la falta de acuerdo en la paritaria del segundo semestre.
En la resolución, la cartera laboral insta a “evitar las medidas de fuerza, con el objeto de privilegiar el diálogo y la negociación paritaria, y en particular en la urgencia de atender el cuidado del salario de los docentes, garantizando la paz social”.
Ante el rechazo de la oferta salarial por no compensar el proceso inflacionario agravado por la devaluación del 22%, la asamblea provincial de la UEPC definió el viernes pasado la convocatoria a un paro de 24 horas para el miércoles con movilización.
De esta manera, la cartera laboral llamó a desactivar las medidas de fuerza del gremio de los docentes estatales ante la negociación bajo el paraguas de la conciliación obligatoria. La medida refleja el escenario de conflicto debido a las posiciones encontradas entre el Gobierno y la UEPC.
En la resolución firmada por Sereno, Trabajo advirtió que “en el contexto de alta inflación que reina en nuestro país, que erosiona el ingreso de los trabajadores de la educación, impone la responsabilidad de avanzar con acuerdos rápidos que permitan proteger el nivel de la calidad del ingreso ante los efectos deteriorantes de la inflación”.
En ese sentido, la cartera laboral recalcó que “los acuerdos deben ser responsables y realistas, primando siempre un criterio de racionalidad”.
Cabe recordar que la administración provincial ofertó un incremento del 20% en agosto sobre los salarios de julio. La propuesta incluye, en septiembre, un aumento del 7%, respecto de los valores de agosto y garantiza a partir de octubre y hasta enero de 2024, que los salarios mantengan el mismo nivel de aumento que la inflación acumulada anual, a través de una cláusula gatillo.