EEUU. “El tiempo se agota”, aseguraron siete relatores independientes de las Naciones Unidas, frustrados con el rechazo de Israel a “terminar con los planes para diezmar la asediada Gaza”. Los expertos calificaron el ataque al campo de refugiados de Yalabia como “un crimen de guerra”.
«Seguimos convencidos de que el pueblo palestino corre un grave riesgo de genocidio«, afirmaron este jueves expertos independientes de la ONU en un comunicado. En ese sentido, Pedro ArrojoAgudo, Michael Fahri, Tlaleng Mofokeng, Paula Gaviria Betancur, Irene Khan, Francesca Albanese y Ashwini K.P. manifestaron que «el momento de actuar es ahora”.
Los siete relatores de derechos humanos destacaron, además, que “los aliados de Israel también son responsables y deben actuar ahora para impedir su desastroso curso de acción».
Los expertos expresaron su «profundo horror» por los ataques aéreos israelíes contra el campo de refugiados de Yabalia, en el norte de Gaza, desde el martes 31 de octubre por la noche, que al parecer ha matado y herido a cientos de palestinos, y los calificaron de violación descarada del derecho internacional.
«El ataque aéreo israelí contra un complejo residencial del campo de refugiados de Yabalia es una violación flagrante del derecho internacional y un crimen de guerra. Atacar un campo en el que se refugian civiles, entre ellos mujeres y niños, es una violación total de las normas de proporcionalidad y distinción entre combatientes y civiles», declararon los expertos.
Los expertos acogieron con satisfacción la resolución de la Asamblea General sobre la protección de los civiles y el cumplimiento de las obligaciones jurídicas y humanitarias, aprobada por una abrumadora mayoría de Estados miembros el 27 de octubre. «Recibimos la resolución con esperanza, pero la necesidad de actuar es ahora», afirmaron.
«Todos los indicios apuntan a que hemos llegado a un punto de ruptura«, advirtieron los expertos, al hacer hincapié en imágenes de personas cogiendo desesperadamente harina y otros artículos de primera necesidad de un almacén de la ONU el domingo (29 de octubre), noticias alarmantes de niños obligados a beber agua del mar ante la falta de agua limpia, informes angustiosos de pacientes, incluidos niños, sometidos a cirugía sin anestesia, y personas con discapacidad y ancianos desplazados y viviendo en tiendas de campaña porque las casas se han convertido en escombros.
«La situación en Gaza ha alcanzado un punto de inflexión catastrófico«, resaltaron. A su vez, remarcaron de la acuciante necesidad de alimentos, agua, medicamentos, combustible y suministros esenciales, así como del riesgo de riesgos sanitarios inminentes.
Alto el fuego humanitario
«Todas las partes deben cumplir sus obligaciones en virtud del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos. Exigimos un alto el fuego humanitario para garantizar que la ayuda llega a quienes más la necesitan. Un alto el fuego también significa que pueden abrirse canales de comunicación para garantizar la liberación de los rehenes«, indicaron los expertos.
Asimismo, expresaron su honda preocupación por la seguridad de los trabajadores humanitarios y de la ONU y de los hospitales y escuelas que proporcionan refugio y servicios médicos vitales a la población de Gaza.
También dieron la voz de alarma por la seguridad de los periodistas, los trabajadores de los medios de comunicación y sus familiares, al tiempo que señalaron que se cortó internet y las comunicaciones, lo que interrumpió las comunicaciones esenciales y la información sobre la situación en Gaza.
«Queremos recordar a todas las partes que el personal y las instalaciones humanitarias y médicas están protegidos por el derecho internacional. Los Estados tienen la obligación de garantizar su seguridad y protección en tiempos de guerra», aseveraron los expertos. «Como ha reiterado en varias ocasiones el Secretario General, Israel y los grupos armados palestinos deben tener en cuenta que incluso las guerras tienen reglas».
Se calcula que en Gaza hay 1,4 millones de desplazados internos, de los que aproximadamente 629.000 buscan refugio en 150 refugios de emergencia del Organismo de Obras Públicas y Socorro de las Naciones Unidas (UNRWA, por sus siglas en inglés). La UNRWA informa de que 70 trabajadores de la ONU han muerto como consecuencia de los bombardeos israelíes en Gaza.
«El pueblo palestino de Gaza, en particular las mujeres, los niños, las personas con discapacidad, los jóvenes y las personas mayores, han soportado décadas de penurias y privaciones«, dijeron los expertos de la ONU. «Pedimos a Israel y a sus aliados que acuerden un alto el fuego inmediato. Se nos acaba el tiempo», copmpletaron.