
CABA. Ante la crisis económica y la pesada herencia recibida, el mandatario cordobés afirmó que en este contexto «debemos estar todos juntos”. Fue un primer contacto de acercamiento. De todos modos, Córdoba mantiene sus reclamos históricos.
El ministro del Interior, Guillermo Francos, recibió en la tarde de este jueves en su despacho de Casa Rosada al gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, en un encuentro al que ambos funcionarios calificaron como “positivo”, y durante el cual analizaron la situación de la provincia y el contexto a nivel nacional.
En el marco de la reunión, Francos destacó las coincidencias con el gobernador cordobés, ya que “en líneas generales, la provincia de Córdoba se encuentra en la misma sintonía que el Gobierno nacional en lo relativo a la necesidad de la reducción del gasto público”.
“Durante la reunión, el gobernador Martín Llaryora nos manifestó su acompañamiento, en el marco del inicio de esta relación institucional con la provincia de Córdoba”, añadió el titular de Interior, quien concluyó que “la intención de la cartera que conduzco es la de continuar reuniéndonos con los demás gobernadores para analizar la situación de cada una de las provincias, con el objetivo puesto en el crecimiento del país”.
A su turno, Llaryora aseguró: “Sabemos que se trata de un momento difícil del país, y por esa razón le manifesté al ministro del Interior el acompañamiento de nuestra provincia en este contexto en el que debemos estar todos juntos”.
Se trata de la primera reunión que Francos mantuvo como titular de la cartera de Interior con un gobernador provincial.
Del encuentro también participaron el ministro de Gobierno de la provincia, Manuel Calvo; y su par de Vinculación Comunitaria, Daniel Pastore.
Fue un primer contacto de acercamiento entre Nación y el distrito mediterráneo. Como se dijo de manera oficial, en el cónclave se analizó la situación de la provincia y el contexto a nivel nacional.
De todos modos, el gobierno cordobés mantiene sus reclamos históricos: las bajas a las retenciones del sector productivo, reparto equitativo de los subsidios y el envío de fondos para la Caja de Jubilaciones.
En su primer discurso como gobernador, Llaryora describió la realidad nacional ante «los errores de la política económica que se profundizaron en los últimos meses», pero también le envió un mensaje al Gobierno de Javier Milei: «Esperamos que cumpla con las promesas que le hizo al pueblo de Córdoba».
En medio de la recesión económica y la posibilidad de caer en estanflación, el titular del Ejecutivo provincial afirmó que esto «nos obliga a ser responsables y tomar acciones para cuidar a los cordobeses».
«Tomaremos medidas que comiencen por la austeridad y por la política, para hacer frente a la caída de los ingresos sin que ello implique desinvertir en áreas sociales claves del Gobierno», indicó el mandatario al aludir a la reducción de ministerios, el congelamiento de las vacantes en el Estado y el recorte en los haberes del gobernador y vice y los funcionarios políticos.