
Córdoba. El arco opositor fracasó en su intento de habilitar el plenario de este miércoles. El oficialismo ya había adelantado su voluntad de no sesionar ante la falta de los consensos políticos. En medio de la tensión, hubo pases de facturas entre los bloques mayoritarios.
Ante la negativa de la bancada oficialista, el interbloque Juntos por el Cambio (JxC), junto a aliados opositores, buscó dar su golpe de efecto con el propósito de sesionar este miércoles en la Unicameral, pero un hecho fortuito derrumbó todo el plan.
En medio del escenario de paridad, y ante el poroteo fino, JxC reunió 31 voluntades a favor de sesionar (UCR, Frente Cívico, PRO, Construyendo Córdoba y la Coalición Cívica). A esa movida se sumaron el vecinalista Rodrigo Agrelo, Luciana Echevarría (FIT-Unidad), Agustín Spaccesi (La Libertad Avanza) y Federico Alesandri (Creo en Córdoba).
Es por ello que a la hora del conteo sumaron 35 voluntades. Le faltó uno para alcanzar el quorum. ¿Dónde estaba? El radical Ariel Grich pegó el faltazo. Fue a causa de un accidente de tránsito que protagonizó cuando viajaba en la mañana de este miércoles desde Río Cuarto a la Capital cordobesa. A raíz de esta situación, la movida cambiemista quedó desactivada.
En medio de la tensión, y ante el fracaso de la sesión, oficialistas y opositores cruzaron duros pases de facturas. De ambos lados se acusaron mutuamente por la falta de quorum que hizo naufragar el plenario.
En rigor, el representante libertario fue el único que se sentó en su banca para registrar su presente en el tablero digital. Por su parte, Facundo Torres (presidente provisorio) le cuestionó a la oposición no ingresar al recinto para dar quorum.
Desde el núcleo cambiemista acusaron de antemano al oficialismo de buscar «cerrar» la Unicameral. Los opositores criticaron que, a través de un correo, el PJ comunicó la decisión de no sesionar en la jornada y trasladar lo que iba a ser el segundo plenario del nuevo período legislativo para el 28 de febrero.