ç
Vaticano. Mediante una carta, el Sumo Pontífice se sumó a la misa y evocando al cura asesinado hace 50 años instó a «tener un diálogo inteligente con el Estado y con la sociedad».
El papa Francisco se sumó este domingo a la misa que se celebró por el 50º aniversario de la muerte del padre Carlos Mugica y mediante una carta pidió «que la grieta se termine reconociendo errores y erradicando la exclusión».
A través de su misiva, el Sumo Pontífice acompañó a quienes se reunieron para recordar al presbítero por el cincuenta aniversario de su muerte violenta en una marcha desde la catedral de Buenos Aires hasta el estadio Luna Park, donde se celebró una misa en su memoria.
“El padre Carlos alienta aún hoy a que en cada barrio se fortalezca una comunidad que se organiza para acompañar la vida de nuestro pueblo y nos interpela a lucha ante todo tipo de injusticia, a tener un diálogo inteligente con el Estado y con la sociedad”, sostuvo.
A su vez, el jefe de la Iglesia Católica destacó: “Él no enseña a no dejarnos arrastrar por la colonización ideológica, ni por la cultura de la indiferencia. Pidamos al Señor que los principios de la Doctrina Social de la Iglesia fructifiquen en nuestras comunidades y, a través de ellas, en toda la vida social”.
En su cartea, el Papa alentó a “buscar lugares de integración descartando la descalificación del otro”. “Que la grieta se termine, no con silencio y complicidades, sino mirándonos a los ojos, reconociendo errores y erradicando la exclusión”, acentuó.
Por otro parte, Francisco indicó que esta es “una celebración de la iglesia” porque es “mucho más que una conmemoración histórica” y que aprovecha esta ocasión para “renovar la presencia fraterna y comprometida entre aquellos que cargan cruces pesadas”.
También se dirigió a aquellos que están padeciendo situaciones críticas y les pidió a los asistentes que continuaran ”poniendo el corazón y el cuerpo al lado de los que sufren todo tipo de pobreza».
