Santa Fe. “Este tipo de delito empieza a bajar porque se detecta a quién compra y roba. Ese control hace que el delito baje”, indicaron desde la administración provincial.
Un procedimiento en conjunto entre la Policía de Santa Fe y el municipio en una chatarrería de zona oeste de la ciudad de Rosario derivó en una serie de allanamientos realizados durante la jornada del jueves pasado.
En el marco del operativo se aprehendieron a siete personas, se secuestraron toneladas de material de procedencia ilícita, una cuantiosa cifra de dinero en efectivo en pesos, dólares y euros; armas de fuego y municiones.
El secretario de Seguridad Pública del Ministerio de Justicia y Seguridad provincial, Omar Pereira, señaló que “los operativos se llevan adelante desde el comienzo del año en negocios, algunos legales, otros no, conocidos como chatarrerías, debido al incremento de robo de cables y otros elementos, que han sido novedades como medidores de agua y de gas que tienen que ver con empresas de servicio público”.
En cuanto al hecho, Pereira expresó que “con un importante trabajo de la subcomisaria Susana Domínguez, titular de la Comisaría 13, se generó un pedido de investigación en un negocio de la zona y se activó el procedimiento”. En ese marco explicó que “se concretó el allanamiento sobre ese primer lugar comercial y luego surgió la necesidad de allanar un galpón que se encontraba frente a éste y los domicilios de quienes serían los propietarios, y que eran adyacentes al mismo lugar”.
En dichos lugares “se encontró mucho cobre, medidores de distintos servicios, esto es por el robo de cables, gran cantidad de bolsas con autopartes, mucho dinero en efectivo, tanto en dólares como en pesos argentinos”, informó el funcionario.
A su vez, el secretario dijo que “al haber control, empiezan a detectarse muchas irregularidades, como la de ayer (por el jueves), que realmente en términos económicos y de cantidad de toneladas de cobre totalmente limpio, más de 2.000 kilos listo para vender, demuestra la cantidad de vecinos que se vieron afectados por toda esta venta de productos que fueron robados”.
En tanto, el secretario de Gestión de Registros Provinciales, Matías Figueroa Escauriza, subrayó: “Realmente este tipo de delito es muy amplio y lo bueno es que como hay control desde el Gobierno Provincial, con el MPA y la Municipalidad de Rosario, empieza a bajar porque se controla a quién compra y a quién roba”.
Por su parte, el secretario de Control y Convivencia de la Municipalidad de Rosario, Diego Herrera, indicó que “el primer galpón tenía habilitación municipal, el otro no, era una SRL, fue todo un trabajo de investigación de campo, para saber qué se estaba vendiendo y sobre qué no podían comprobar la trazabilidad de los objetos”.